Se ubicó en el primer lugar del podio por segundo año consecutivo, remarcó Víctor Tonelli, consultor en carnes.
Gorina lideró el top five vendiendo al exterior 25.429 toneladas peso
producto por 140,8 millones de dólares. De ese volumen, su principal destino,
siempre en peso producto, fue China con 9215 toneladas.
En el segundo puesto estuvo otro frigorífico nacional, Arre Beef. Exportó el año
pasado 23.327,2 toneladas por US$ 131,5 millones. En su caso, su mayor destino
también fue China, con 8847 toneladas del total vendido.
Recién en el tercer lugar aparece una firma multinacional. Se trata de la brasileña JBS, que colocó en el exterior 21.411,8 toneladas peso producto. En valor vendió US$ 123,5 millones. JBS también tuvo a China su primer cliente, con 11.589,8 toneladas.
En el cuarto puesto se posicionó Friar, de la aceitera Vicentín. Friar exportó 14.396,2 toneladas por 108,4 millones de dólares. Para esta empresa, Israel fue el primer comprador de su producto con 5.248,6 toneladas.
Como quinto exportador estuvo Marfrig, otro grupo brasileño, que colocó un total de 7558 toneladas peso producto por US$ 60,8 millones. Para Marfrig su primer destino del producto fue Israel, que adquirió 3503,8 toneladas.
Según el relevamiento oficial, en total exportaron carne vacuna 40 establecimientos. Totalizaron 158.829 toneladas peso producto, que en equivalente res con hueso hacen 238.243 toneladas. El negocio representó ingresos para el sector por US$ 1068 millones. Vale recordar que en 2005, antes de que el gobierno anterior interviniera el mercado de carnes, la Argentina exportaba en res con hueso más de 700.000 toneladas.
Más allá de las estadísticas de la actividad, para Tonelli las empresas afrontan un escenario complejo en cuatro de sus principales variables que hacen al negocio. Esto es, el costo de la materia prima (la hacienda), la capacidad ociosa, el costo laboral y la energía. "Todo eso se fue para arriba mientras el dólar sigue siendo el mismo", explicó a LA NACION.