Aficionado a los golpes de timón, como el que acaba de dar el Gobierno abandonando el gradualismo en las devaluaciones, en las tres carpas que alquila en el balneario Cocodrilo de Pinamar, Carlos Zannini tomó otras decisiones. Entre ellas, que Axel Kicillof cambiara un pasaje que lo llevaba a Nueva York por uno hacia París para intentar un arreglo por la deuda impaga. El ministro de Economía intuyó que para dar algún tipo de financiamiento, los “lobos” de Wall Street lo iban a atosigar de preguntas sobre sus planes.
“Los mercados son forward looking , miran los riesgos hacia adelante más que los cadáveres del pasado”, justificó uno de esos operadores. Y en París a Kicillof le podía ir mejor. Según trascendió, la propuesta ante el club de acreedores donde España, Alemania y el Reino Unido nos pusieron bolilla negra, consistiría en tres pagos de US$ 2.000 millones en tres años, más la aceptación del llamado artículo IV del FMI. O sea, supervisión de las cuentas públicas, como la que se aplica a todos los socios del Fondo.
Lleva tiempo y tiene que venir una misión del FMI.
Ya en París, un interlocutor definió la exposición de Kicillof el lunes pasado como un sermón en defensa de Cristina.
Ante una pregunta, el ministro soltó que su esquema consiste en acelerar distintas variables como el tipo de cambio, precios y algunas tarifas para estabilizar la economía desde marzo.
Puestos a describir su percepción, fuentes diplomáticas recordaron las conversaciones entre Napoleón y Pierre Laplace. Napoleón le preguntó por Dios. El matemático le respondió que se trataba de una realidad inexistente. Esa sensación de realidad inexistente es la que habría quedado en el organismo. Y a juzgar por la devaluación de ayer, marzo se anticipó a febrero.
¿Llegan?, s e preguntaban anoche los mismos empresarios que se encontraron en Mamá Gansa, la chacra de Jorge Brito en Punta del Este el sábado pasado.
El equipo económico confía en un dólar mágico que convenza a los productores a liquidar la soja y lo que obtengan de maíz y girasol. Creen que el campo, que ha perdido rentabilidad, va a responder. Tienen otro anzuelo: el 28 de febrero el Gobierno devolverá a los productores el 23% de las retenciones que les descontaron en el trigo.
El vice de la UIA, José Urtubey, confiesa que la devaluación es alivio para las economías regionales. “El tema del momento es la inflación. Es un desafío y necesitamos madurez ”. Urtubey cuenta que la industria creció apenas 2% en 2013 y que las perspectivas no son felices en 2014. El economista Jorge Vasconcelos advierte que si esta devaluación no es acompañada por otras medidas se irá a los precios. Enero cierra con una inflación de 4,5%.
Pronto habrá un nuevo índice de precios. Pero hay pocas expectativas.
Kicillof mantiene la misma intervención que Guillermo Moreno colocó en el INDEC. Y los técnicos de las provincias convocados aseguran que cargan datos en un pozo ciego. Después no pueden corroborar. José Luis Machinea, ex ministro de Economía, lo resume de este modo: “El problema con el INDEC no es metodológico, sino que mienten con los números ”.
Débora Giorgi y Jorge Capitanich arrancaron el año con reuniones con las automotrices.
Enero les sonríe con un crecimiento de 9% en las ventas en comparación con 2013. Los ministros les pidieron aumentar exportaciones. Los industriales respondieron que tienen 40.000 vehículos importados en las playas de Zárate que la Aduana no deja ingresar y que, además, Brasil disminuyó sus pedidos.
A alguien se le ocurrió transmitírselo a Cristina.
Pero un funcionario desalentó al contar que cuando la Presidenta los llama es para preguntar lo que ella quiere saber. Y si al funcionario se le escapa una inquietud, recibe como reproche, “ese tema no está en la agenda”. Por cierto, hay mucho fuera de agenda. En EE.UU. se libra otra batalla judicial por los fondos buitre. En mayo, la Corte Suprema define si toma el caso argentino. Si decide consultar al Solicitor General, las cosas se postergarían a 2015. ¿Qué puede pasar? Marcelo Etchebarne, que litiga en Nueva York, recuerda que no somos Detroit, que cayó en quiebra y acaba de ser beneficiada por un fallo que señala que no debe abonar a sus acreedores, entre ellos, Barclay’s.
Argentina, en cambio, tendrá que pagar. Y en eso hay pocas dudas: Argentina cumple.
Se lo dice Cristina a los CEO de las multis que la visitan: “ Vendo la quinta de Olivos antes de defaultear ”, algo que los ejecutivos toman como broma. Lo mismo le dirá al príncipe japonés Fumihito cuando la visite los primeros días de febrero. Deslizan que le pedirá que ayude al país para lograr un acuerdo con el Club de París.
El investigador Mario Damill prescribe “ una relojería de consensos para salir del atolladero ”. En esa línea, un buen número de empresarios empezó a reivindicar la idea de una negociación paritaria distinta. Hicieron punta los banqueros con la Bancaria, con un aumento de $ 1.800 y una suma fija por única vez de $ 1.200. En porcentaje es el 23%. “ Pobretón para el gremio y generoso para los bancos ”, contaron en una entidad. El dato es relevante porque es todo lo que logró el gremio en uno de los sectores que más gana.
Cómo establecer otros lazos con los sindicatos será uno de los temas de debate el martes en la Rural de Palermo entre casi todas las cámaras empresarias. Algunos comentarán allí la invitación especial que recibieron.
Carlos Slim será anfitrión de Carlos Miguens, miembros de la familia Rocca, Alejandro Bulgheroni, Eduardo Eurnekián, Enrique Pescarmona y los Roemmers, entre otros, para sus encuentros “de padres a hijos”. El 23 de mayo en México, la elite argentina constatará que, al menos por número y tamaño de empresa, ya fueron superados por chilenos y peruanos.