Entre neblinas, lloviznas, altísima humedad y nubosidad permanente, el
progreso de la siembra está lejos de entrar en ritmo. Las labores cubren un 12%
del área planeada. Pero a pesar del retraso, que va dejando fuera de siembra a
los ciclos largos, la suba de área se ubica en el rango del 30 a 35% respecto al
otoño del 2015. La fertilización será clave esta campaña, tanto para reponer
nutrientes como para obtener calidad de grano. Las abundantes lluvias de la
campaña pasada dejaron a los suelos con serias deficiencias. Casi en el final,
con 96%de avance, la cosecha de soja de primera muestra una leve mejoría en los
rindes finales, no así en la calidad obtenida. Los pronósticos indican
inestabilidad en aumento para esta jornada y para los próximos días. Recién el
lunes 6 de junio, la llegada de aire frío y seco despejaría el ambiente para
proseguir la siembra.
El maíz vuelve a las pistas
Crece el entusiasmo por el cereal de verano. Comenzaron las ventas de
semillas de maíz y los insumos necesarios para la nueva campaña gruesa. Atrae el
precio y sus beneficios en la rotación. A pesar que en el verano se perfila una
Niña, las intenciones de aumento de área respecto a la campaña pasada se
mantienen firmes en el 30%.
Lento avance de siembra
Sólo avanzaron un 8% las sembradoras de trigo en esta semana, cubriendo el 12% del área de trigo. La inestabilidad, presente durante toda la semana, impidió avanzar con más fluidez las labores. Los análisis de suelo dan bajos niveles de nitrógeno, producto del lavado por las lluvias, y también, en los lotes tradicionalmente sojeros, el fósforo es escaso. Las malezas no están generando inconvenientes, pero la humedad es limitante. No hay piso para que pasen las sembradoras, los días pasan y la fecha de los ciclos largos se está pasando. Pese a ello, siguen las ganas latentes por aumentar la cantidad de cuadros de trigo.
Se van definiendo los rindes finales de la oleaginosa
Tan solo resta un 4% de la soja de primera por cosechar y los números re
rinde se van cerrando. Hay un leve aumento del rinde promedio por los cuadros de
zonas que no fueron afectadas, pasando a 36 qq/ha la región. La cosecha de
segunda avanza al 93% con rindes de 28 qq/ha. Las semanas fueron pasando sin dar
chances de que baje la humedad del grano.
Los maíces que se esperaban y lo que terminaron siendo
Los muy buenos resultados que se esperaban en los maíces de primera, por algunos problemas durante el desarrollo que se evidenciaron en el final, sumado a los problemas que sobrevinieron por el temporal, cayeron en pequeña medida. De los 95 quintales que se esperaban en marzo, la colecta va ajustando los rindes de la región a 93 qq/ha. El de segunda sufrió más los embates, de los 90 que se esperaban alcanzar, ahora se estiman con 83 quintales. Las labores de cosecha en el de primera, señalan un 89% de avance, mientras que los sembrados en diciembre siguen en pie con muchísima humedad en grano.