Pese a las bajas reflejadas ayer por las pizarras de la Bolsa de Chicago, que superaron los 4 dólares por tonelada, la soja logró completar el octavo segmento comercial alcista consecutivo en la plaza estadounidense, producto de las fuertes subas registradas en las dos ruedas precedentes, donde la especulación de los fondos de inversión y las contingencias de la cosecha argentina alentaron las nuevas mejoras para la oleaginosa.

Al momento de fijar los ajustes de la jornada, las posiciones julio y agosto de la soja en Chicago mostraron bajas de US$ 4,50 y de 3,21, mientras que sus ajustes resultaron de 415,94 y de 412,27 dólares por tonelada. En el balance de la semana, estos contratos ganaron un 4,19 y un 3,60% frente a los valores vigentes el viernes anterior, de 399,22 a 397,94 dólares por tonelada.

La caída diaria respondió a una toma de ganancias de los inversores, que durante la rueda se desprendieron de unos 12.000 contratos, equivalentes a poco más de 1,6 millones de toneladas. No obstante, la fuerte devaluación del dólar frente al euro, que llevó la relación entre ambas monedas de 1,1154 a 1,1359, en un movimiento que mejora la competitividad de las exportaciones estadounidenses, limitó las pérdidas e incluso posibilitó la mejora de las posiciones correspondientes a la campaña 2016/2017, como noviembre, que sumó US$ 1,28 al cerrar la jornada con un ajuste de 398,76 dólares por tonelada.

En cuanto a la extendida tendencia alcista de la soja, las pérdidas productivas en la Argentina y en Brasil ya están asumidas en el actual nivel de precios. Pero las lluvias que se registraron durante la semana en amplias zonas agrícolas argentinas acentuaron la atención de los operadores estadounidenses respecto de nuevas demoras en la cosecha y de mayores mermas en la calidad de los granos, ambos, factores que podrían implicar más chances para la mercadería de EE.UU. en el mercado global de poroto de soja y de subproductos.

En ese sentido, el saldo de la semana de negocios en Chicago también fue positivo para el precio de la harina, que ganó un 2,90% al pasar de 443,79 a 456,68 dólares por tonelada, y del aceite, que sumó un 2,48% al variar de 694,01 y de 711,20 dólares.

El viernes próximo el USDA publicará su nuevo informe mensual de oferta y demanda de granos en el nivel mundial, por lo que la expectativa de los operadores estará centrada en el tratamiento que el organismo le de, particularmente, a las existencias finales estadounidenses. Hasta llegar a ese reporte oficial, al mercado le prestará atención a las estimaciones privadas, que marcarán una orientación para los precios, según el promedio que vaya surgiendo de las mismas.

En el mercado doméstico, si bien se advirtió una menor disponibilidad general de los compradores a pagar los precios vigentes anteayer, las necesidades particulares volvieron a quedar de manifiesto con el transcurrir de las operaciones. Así, desde una oferta abierta inicial de $ 4000 por tonelada para la zona del Gran Rosario, que implicaba una caída de entre 100 y 150 pesos, las propuestas fueron creciendo hasta un rango de 4030 a 4100 pesos, con negocios puntuales de la exportación que se ubicaron cerca de los 4150 pesos.

Los precios de la oleaginosa también cerraron en un nivel estable para Bahía Blanca y para Necochea, dado que los compradores pagaron 4100 por tonelada disponible.

En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), las posiciones julio y noviembre de la soja resignaron un dólar y cerraron con ajustes de 305 y de 312,50 dólares por tonelada. En el balance de la semana, estos contratos sumaron un 3,21 y un 3,27% frente a los valores vigentes el viernes anterior, de 295,50 y de 302,60 dólares.

Cereales firmes

Por tonelada de maíz con entrega en el muy corto plazo los exportadores pagaron ayer $ 3000 para la zona de Rosario, sin cambios, en tanto que por mercadería con descarga contractual se propusieron $ 2650. Para Bahía Blanca la oferta bajó $ 100 y quedó en $ 2800.

Las entregas diferidas para el segundo semestre se negociaron a US$ 190/182 para Rosario; a US$ 192/183 para Bahía Blanca, y a US$ 180 para Necochea. En el Matba, las posiciones julio y septiembre sumaron US$ 1,50 y 1,70, en tanto que sus ajustes fueron de 189,50 y de 185,70 dólares.

En Chicago, los contratos julio y septiembre del maíz subieron US$ 1,18 y 1,58, al cerrar con ajustes de US$ 164,66 y de 165,25. En la cuarta semana consecutiva alcista, estas posiciones ganaron un 1,34 y un 1,33% frente a los valores vigentes el viernes anterior, de 162,49 y de 163,08 dólares.

El trigo argentino ayer se cotizó a $ 2550 en Bahía Blanca; a $ 2500 en Rosario y a $ 2400 en Necochea, con alzas de entre 20 y 50 pesos. El trigo nuevo se mantuvo en 170 dólares.

Las cosechas de Brasil, en franco retroceso

CHICAGO (Reuters).- La consultora Informa Economics proyectó ayer la cosecha de maíz 2015/2016 de Brasil en 78,90 millones de toneladas, por debajo de los 81 millones calculados el mes pasado, particularmente producto de la caída de la segunda zafra, como consecuencia del clima seco. De igual modo, recortó de 100 a 98,50 millones el volumen de la producción de soja de Brasil.

Para la Argentina, la firma de análisis estadounidense mantuvo sin cambios su estimación para la producción de soja 2015/2016, en 55 millones de toneladas.

Respecto de la campaña de trigo en los Estados Unidos, Informa elevó ayer su pronóstico para la cosecha de las variedades de invierno a 39,41 millones de toneladas, desde los 38,24 millones estimados previamente.