Las entidades ruralistas respondieron con una medida contundente la decisión del Gobierno de sostener las retenciones a las exportaciones de soja y coparticipar un porcentaje, decretaron un cese de comercialización de granos y ganado destinado a la faena desde hoy, y que se extenderá por una semana. El anuncio fue acompañado por cerca de setenta puntos de protesta en todo el país, muchos de ellos con cortes de rutas. Los más duros: el encabezado por Alfredo De Angeli de la Federación Agraria en Gualeguaychú y el de Armstrong, en la provincia de Santa Fe.
El anuncio de la reanudación de la confrontación abierta con el gobierno de Cristina Kirchner fue formulado en la sede de la Federación Agraria Argentina (FAA), donde se reunieron el titular de las Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Mario Llambías; su par de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Hugo Biolcati; los vicepresidentes de la FAA, Ulises Forte y Pablo Orsolini, y el asesor económico de la Coninagro, Daniel Asseff.
La nueva medida de protesta –la séptima contra la política agropecuaria y ganadera que soporta el gobierno de Cristina Fernández– tuvo como detonante la decisión de la primera mandataria de “congelar” las retenciones en el 35%, y repartir entre intendentes y gobernadores un porcentaje con destino específico para obras públicas. Los ruralistas interpretan que se trata de una forma de clausurar el diálogo.
“Esto no es una cuestión de días más o menos, los tiempos están vencidos, se trata de tratar los temas reales de la agenda agropecuaria y no cosméticamente como lo ha hecho el Gobierno hasta ahora”, remarcó Biolcati. Y mencionó que los productores sienten “el ninguneo frente a cómo se afectan las economías de las regiones de todo el país”.
Más temprano, el titular de la Federación Agraria, Eduardo Buzzi, le había dado “todo el apoyo” a los productores que cortan rutas. Orsolini completó, al señalar que la Mesa de Enlace no alienta los cortes de ruta porque no quiere “perjudicar a la población en general”, aunque varios miembros de las entidades, como el propio De Angeli, están al frente de los piquetes.
Con la convocatoria del cese de comercialización –están exceptuados los alimentos perecederos, ganado de invernada y productos afectados por la sequía–, las protestas en las rutas se multiplicaron. Con quema de neumáticos y rastras, los productores agropecuarios de Gualeguaychú cortaron de manera total la ruta 14 a la altura del kilómetro 53, sitio emblemático de las protestas rurales contra el gobierno nacional desde hace poco más de un año.
Durante la mañana, los chacareros tuvieron que levantar el corte debido al reclamo de los choferes de camiones de carga, que querían atravesar esa estratégica ruta del Mercosur. Entre el humo que despedían las cubiertas y una fila de camiones de más de seis kilómetros, los choferes habían comenzado una acalorada discusión. “Les damos hasta las 15.30 para levantar el piquete y dejarnos pasar”, advirtieron. El corte se levantó y poco después los productores volvieron a interrumpir el paso de vehículos. La misma situación se repitió por la noche.
También chacareros de la FAA y autoconvocados se apostaron en el Túnel Subfluvial con un corte total por tiempo indeterminado. Frente al nuevo conflicto con el Gobierno, los productores se equiparon bien: cinco tractores, algunas herramientas de trabajo, cuatro casillas con siete cuchetas cada una y una carpa de seis metros por cinco. “Por ahora, de la comida se encargan en cada pueblo, porque la gente se va y vuelve”, señaló el dirigente de la FAA de Entre Ríos Juan Echeverría.
Mientras que en la provincia de Santa Fe, un grupo se sumó al corte total de tránsito en la ruta 9, a la altura de Armstrong, donde obreros autoconvocados de la industria metalmecánica venían protestando desde hace un mes por despidos, suspensiones y la merma de la actividad en fábricas de la zona. “Decidimos apoyarlos porque ellos están peor que nosotros”, señaló el productor Gerardo Coliti.
Cerca de la noche, en esta localidad se vivió un clima de tensión similar al de Gualeguaychú horas atrás. Varios camioneros se quejaron ante los productores porque no los dejaban pasar.
También hubo protestas en Tucumán con cortes cada treinta minutos sobre la ruta nacional 9; en Córdoba en las zonas de Sinsacate y Almafuerte; en La Pampa en la ruta nacional 5, y en ciudades del interior bonaerense, entre ellas, Bahía Blanca, Azul, Balcarce, Chivilcoy, Saladillo, Nueve de Julio y Olavarría.
JUSTICIA VELOZ CONTRA PRODUCTORES. El juez subrogante del Juzgado Federal Nº 1 de San Nicolás, Alberto Martín Martínez, dictó el procesamiento de seis personas que están imputadas del delito de corte de la ruta 9 a la altura de Ramallo, realizado el 18 de marzo de 2008 en medio de la vieja guerra gaucha. La medida se conoció ayer y fue interpretada por los productores como una señal intimidatoria para que se abstengan de repetir ese modo de protesta en esta renovada versión del conflicto. “Para el procesamiento se tomó como prueba la declaración policial y los informes del Registro Nacional de Vehículos que se encontraban impidiendo la libre circulación por la ruta nacional 9”, explicó el fiscal Federal Juan Patricio Murray.
En tanto, continúa la tramitación de la causa que investiga lo ocurrido en otro mojón de la misma ruta, a la altura de San Pedro. El juez Carlos Villafuerte Ruzo, titular del Juzgado Federal Nº 1 –con criterio opuesto al que aplicó ahora quien lo subroga por licencia– había dictado el sobreseimiento de los imputados; la fiscalía apeló y ahora está en manos de la Cámara de Federal con sede en Rosario.
Uno de los productores procesados en Ramallo, Daniel Berdini, destacó “la velocidad que tiene la Justicia para estas cosas. Somos como conejitos de Indias: vamos, pisamos la ruta y nos quieren meter presos”. Sus abogados, del estudio jurídico Montoto, Nuciari y Capridi evaluaron que hay “escasas pruebas”“ y que se busca “aplacar los reclamos sociales, que cada día son más crecientes”.