LA PLATA.- Seis años después de su inconcluso intento por reformar
integralmente la policía bonaerense, León Arslanian volverá a conducir el
Ministerio de Seguridad provincial con los mismos objetivos: "Profundizar
la descentralización policial y el control político de la fuerza, activar la
participación comunitaria y avanzar en la lucha contra la corrupción".
Arslanian, que asumirá el próximo martes 13, prometió una "depuración
necesaria", el descabezamiento de la cúpula de la fuerza, la creación de
un cuerpo especial para el conurbano y el fomento de la participación activa de
civiles, que hasta podrían incorporarse al escalafón para conducir
comisarías.
Así lo explicó durante una conferencia de prensa, en la que anunció su
decisión de aceptar el cargo, acompañado por el gobernador Felipe Solá y la
vicegobernadora y titular interina de la cartera, Graciela Giannettasio.
Solá dijo que se busca "un plan definitivo que solucione, aunque sea
gradualmente, el problema de la seguridad". También consideró que el ex
camarista "además de tener un conocimiento total de la seguridad y de la
cuestión jurídica que lo rodea, tiene un pleno relacionamiento profesional y
político con el gobierno nacional, porque habrá mucho trabajo conjunto".
Solá garantizó "pleno apoyo de todo su gobierno" a la nueva gestión
y aseguró que también habrá respaldo de parte del gobierno nacional.
Presupuesto
El gobernador aclaró que los 1000 millones de pesos que reclamó para financiar
el plan de seguridad "fueron conversados con el ministro (de Justicia de la
Nación) Gustavo Beliz y seguirán tratándose con el gobierno nacional,
independientemente de la resolución que se tome sobre la ley de
coparticipación federal". Y auguró: "De una sola cosa estoy
absolutamente seguro y es de que voy a ser gobernador hasta 2007", subrayó
Solá.
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Al referirse a los planteos que motoriza Blumberg -con quien Arslanian se
reuniría en las próximas horas-, Solá dijo: "Somos sensibles a los
reclamos y muchas veces cambiamos nuestras actitudes, como se ha visto con los
legisladores nacionales o provinciales en relación con la conmoción que
producen distintos hechos".
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Solá promovió la conformación de una "fraternidad entre vecinos que
ayude a la acción policial con una movilización en toda la provincia, si no
nuestras políticas serán incompletas".
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Al ratificar que retomará las bases de la política instaurada en 1998,
Arslanian aclaró que "tendrá un necesario grado de adecuación, habida
cuenta de los años que han pasado".
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De hecho, recobrarán plena vigencia las leyes 12.154 y 12.155, votadas en 1998,
que definieron el organigrama de funcionamiento de la policía y que
determinaron la desaparición de la figura del jefe de policía. No obstante, el
letrado aclaró: "Si veo que hay aspectos que deban modificarse o reformas,
hay que hacerlo". También dejó entrever que se mantendrá el Plan
Director de Seguridad Pública lanzado durante la gestión de Juan José
Alvarez. "No lo veo incompatible", dijo.
"Por supuesto que hay una relación entre policía y delito, y éste es un
fenómeno del que debemos hacernos cargo con un carácter absolutamente
prioritario. Hay que restituirle la confianza a la población en su policía,
hay que recuperar el prestigio y que sea un brazo eficaz de aplicación y
cumplimiento de la ley", señaló Arslanian, que habló de
"depuración en los casos en que fuese necesaria", pero también de
"fortalecimiento institucional, capacitación y entrenamiento".
Consultado por LA NACION, se comprometió a profundizar la investigación
patrimonial de los jefes de la fuerza, que derivó en la apertura de 19 causas
penales y, hasta ahora, en la detención del comisario Basilio Barchuk, por
presunto enriquecimiento ilícito.
Arslanian no dio mayores precisiones, pero dijo que lo acompañará "el
mismo equipo" que en su anterior gestión. En realidad, sólo estaría
confirmada la participación de Alberto Beraldi. En cambio, no serían de la
partida los hoy diputados Alvarez ni María del Carmen Falbo, ni tampoco el ex
subsecretario de Logística y Planificación Marcelo Saín.
"Lo que propuse la otra vez fue fortalecer la relación entre policía y
comunidad, tendiendo un puente de plata, y esto se hace a partir de la
participación de la comunidad", dijo Arslanian, que aseguró que existe un
"déficit en la cantidad de policías que se remediará con la
desafectación de agentes en las áreas administrativas y con una mejor
distribución".
"Hay que generar un cuerpo policial para el conurbano, específicamente en
materia de seguridad. Sé que la Nación maneja alguna idea, será cuestión de
tener algún consenso. Hay voluntad del gobierno nacional, y el empeño de Solá
es lograr los mejores niveles de coordinación."
Cara a cara
Blumberg
Sobre la designación de León Arslanian como ministro de Seguridad, Juan Carlos
Blumberg dijo: "Es una locura, es una de las personas que hicieron mucho
daño a la seguridad de la provincia de Buenos Aires. Es retroceder, hay que
buscar gente nueva e idónea. El ya hizo y por lo que pude averiguar fue un
desastre".
Arslanian
El flamante ministro de Seguridad provincial, León Arslanian, le respondió a
Blumberg: "Algunas de las dudas que tiene el señor Blumberg se van a
disipar cuando hable conmigo. Sus apreciaciones se basan en equivocaciones: por
ejemplo, el Código de Procesamientos en materia penal, cuya vigencia critica, y
la actuación del fiscal Jorge Sica, no corresponden a mi período".
Dichos
Reforma: "Los ejes de la reforma de 1998 tienen que estar estar presentes,
y tendrán el grado de adecuación que las circunstancias de hoy imponen. La
profundización de la descentralización, activación de la participación
comunitaria, la lucha contra la corrupción, son ejes permanentes".
Corrupción: "Por supuesto que hay una relación entre policía y delito, y
éste es un fenómeno del que debemos hacernos cargo con un carácter
absolutamente prioritario. Hay que restituirle la confianza a la población en
su policía, hay que recuperar el prestigio de la policía".
Miedos: "Les temo a la incomprensión, a la intolerancia y a la
impaciencia. Ni yo soy un hombre providencial ni creo en ellos, siempre he
creído en los programas y en propuestas. No hay soluciones mágicas en el tema
de la seguridad".
Enriquecimiento: "Estoy totalmente de acuerdo con la investigación
patrimonial, que es uno de los modos de controlar la corrupción policial".
Purga: "La purga es conveniente, necesaria y debe ser hecha en situaciones
que tienen que ver con una fuerte necesidad correctiva".
Comunidad: "La participación comunitaria tiene que ver con el control
interno del funcionamiento policial, con la formulación de políticas de
seguridad".
Paz: "El camino para lograr la tranquilidad pública, la paz social, tiene
muchas vertientes. Una, subsidiaria, es la reforma penal y el aumento de la
pena, porque la pena no disuade, lo que sí disuade es la eficacia en la
prevención y en la represión del delito. Por eso con esto tiene que ver el
aparato policial".


