Por tercera semana consecutiva, los precios de la soja, el maíz y el trigo quedaron ayer con balance negativo en la Bolsa de Chicago. La abundante cosecha estadounidense de granos gruesos y la firme competencia que registra el trigo en el mercado de exportación, sobre todo tras la sostenida apreciación del dólar frente al euro -le resta competitividad a las materias primas de EE.UU.-, fueron los principales fundamentos bajistas para las cotizaciones.

Ayer, las pizarras de la plaza estadounidense mostraron subas de US$ 1,38 y de 1.56 sobre los contratos noviembre y enero de la soja, cuyos ajustes resultaron de 362,02 y de 364,68 dólares por tonelada. En el balance semanal, estas posiciones resignaron un 3,55 y un 3,48% frente a los valores vigentes el viernes anterior, de 375,34 y de 377,82 dólares por tonelada.

El ligero repunte evidenciado ayer por la soja fue una mezcla de mejora técnica, tras la persistente tendencia bajista que dejó las cotizaciones en el nivel más bajo en cuatro años, y de expectativa positiva por las compras de soja estadounidense que está acordando una delegación de empresarios chinos que visita los Estados Unidos. Pasado mañana se conocerían más precisiones sobre el volumen comprometido.

Como lastre bajista, la soja cuenta con las proyecciones publicadas anteayer por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, en sus siglas en inglés), de una cosecha estadounidense récord, con 106,50 millones de toneladas, y existencias finales por 12,93 millones, volumen que implica un incrementó del 264,25% respecto de los 3,55 millones de toneladas con que terminó el ciclo 2013/2014.

La debilidad de los precios internacionales de la soja puede prolongarse si, como parece, la oferta de América del Sur apunta también hacia un volumen récord en la nueva campaña. En ese sentido, ayer la consultora brasileña Safras & Mercado elevó su cálculo para la cosecha 2014/2015 de Brasil de 94,45 a 95,90 millones de toneladas, por encima de los 94 millones proyectados anteayer por el USDA en su informe mensual.

En el mercado doméstico, las fábricas se mostraron dispuestas a pagar en forma abierta $ 2250 por tonelada de soja disponible en la zona de Rosario, un valor que, si bien resultó $ 50 superior al vigente el jueves, fue rechazado por los vendedores, razón por la cual las operaciones fueron muy bajas. Por fuera del circuito de las Bolsas, en negocios directos se habrían acordado ventas en hasta 2300 pesos por tonelada, con condiciones particulares, como volumen y pago diferido.

En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), las posiciones noviembre y mayo de la soja sumaron US$ 2,30 y 0,20, mientras que sus ajustes fueron de 271,50 y de 246 dólares por tonelada.

Tendencia consolidada

Para el maíz estadounidense el cierre de la semana confirmó la tendencia bajista que se inició a fines de mayo pasado y que puso las cotizaciones del cereal en el punto más bajo de los cuatro años. Los contratos diciembre y marzo ayer perdieron US$ 0,98 y 0,99, mientras que sus ajustes fueron de 133,26 y de 138,18 dólares por tonelada. En el balance del segmento comercial, estas posiciones perdieron un 4,92 y un 4,82% frente a los valores vigentes el viernes anterior.

La cosecha récord de 365,66 millones de toneladas y las existencias finales por 50,84 millones estimadas anteayer por el USDA continuaron siendo los fundamentos negativos para las cotizaciones.

En el nivel local, los exportadores ofrecieron $ 980 por tonelada de maíz para Bahía Blanca y $ 950 para Necochea, con mejoras de 10 pesos. En San Martín, el cereal se mantuvo en $ 930, aunque se habrían concertado operaciones en $ 950 por tonelada. Por cereal de la próxima cosecha, con entrega en marzo, la demanda volvió a proponer US$ 120.

La posición diciembre del maíz en el Matba se mantuvo estable, con un ajuste de 116 dólares por tonelada, mientras que el contrato abril perdió un dólar y concluyó la jornada con un precio de 122 dólares.

Respecto del trigo, ayer la posición diciembre en Chicago y en Kansas retrocedió US$ 2,57 y 4,78, en tanto que su ajuste resultó de 184,64 y de 217,98 dólares por tonelada. En el balance semanal, el grano fino fue el mayor perdedor. En efecto, el contrato citado cayó un 6,12 y un 5,61% frente al precio vigente el viernes anterior, de 196,67 y de 230,94 dólares, respectivamente.

Para el trigo de los Estados Unidos son varios los fundamentos negativos que hoy deprimen las cotizaciones. El último lo aportó anteayer el USDA, al elevar de 18,05 a 19,01 millones de toneladas las existencias finales de la campaña 2014/2015, cuando el mercado esperada un volumen de 18,15 millones. Anteriormente, el mercado ya contaba con la influencia bajista derivada de la competencia de los trigos de la zona del Mar Negro y de la UE, potenciada por la firmeza del dólar frente al euro, que le resta competitividad a las materias primas estadounidenses.

En el mercado doméstico, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires informó que los molinos pagaron entre 1400 y 1550 pesos por tonelada de trigo. A diferencia de los días anteriores, los exportadores no hicieron ofertas por trigo de la nueva cosecha. En el Matba, la posición enero bajó US$ 1,50 y cerró con un ajuste de US$ 159,50.