Culpó a las empresas de querer ganar sin producir más y advirtió que puede haber aperturas selectivas de las importaciones para contener los precios. Es curioso. A la economía le escasean los dólares y ello impulsa la suba del blue. La raíz del problema es la inflación, pero el remedio empujaría aún más la devaluación.
Un mayor nivel de importaciones aumentaría la demanda de dólares. Es exactamente lo contrario de lo que hasta ayer estuvo haciendo el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno. Personalmente el funcionario se encarga de prohibir compras en el exterior.
La amenaza suena poco creíble. El Gobierno debió hace pocos días extender y aumentar el impuesto a los gastos en turismo en el exterior. Y los datos de la balanza comercial difundidos ayer muestran una caída muy importante del superávit entre exportaciones e importaciones.
La importación de energía y combustibles para atender el enorme déficit local se lleva muchísimos dólares. ¿De dónde saldrán los necesarios para importar alimentos para que compitan con productores locales que supuestamente están especulando?
El problema principal de la Argentina es que tiene un gasto público insostenible. El déficit fiscal no deja de empeorar. Y como nadie quiere prestarle a la Argentina, y el Gobierno no quiere bajar los gastos, la única forma de financiación es emitir enormes cantidades de dinero.
"Nunca en treinta años de democracia vi un gobierno que manejara tan mal la economía", dijo ayer desde Washington el argentino Claudio Loser, ex número dos del FMI.
El economista cree que la población está pagando costos enormes e innecesarios a raíz de las malas políticas económicas.
El presidente del Banco Ciudad, Federico Sturzenegger, subraya la parálisis que en la economía producen la inseguridad, el cepo y el aumento de las restricciones.
El otorgamiento de créditos hipotecarios cayó este mes 60% respecto de marzo de 2012. Y hay 1500 familias que obtuvieron los préstamos y nadie quiere venderles una vivienda en pesos.
INCERTIDUMBRE CRECIENTE
Sturzenegger cree que todos los esfuerzos del Gobierno poniendo parches para contener la inflación y la suba del dólar son insuficientes. Y compara la situación con la existente cuando comenzó a desmoronarse la "tablita" de Martínez de Hoz. Inflación, déficit fiscal y atraso cambiario que desalienta las exportaciones.
Justamente Martínez de Hoz pensó que abriendo la economía lograría contener los precios. La diferencia es que lo hizo cuando todavía no había atraso cambiario.
Loser señala como un problema grave la incapacidad de la Argentina para atraer capitales, y puso como ejemplo de la difícil situación la decisión de la minera brasileña Vale de abandonar su inversión en una mina de potasio en Mendoza. "El Gobierno se ha creado enormes problemas con muchos países por sus medidas proteccionistas", sostuvo el economista.
Tampoco el país podría obtener ahora créditos en el mercado financiero internacional por su pelea inconclusa con los bonistas que no aceptaron los canjes de deuda. Y también por la deuda impaga con el Club de París y las empresas extranjeras que ganaron reclamos presentados en el tribunal arbitral del Banco Mundial (Ciadi).
Amonestada por el Fondo Monetario Internacional por la falsificación de las estadísticas, la actual administración no encuentra vías para obtener los dólares que necesita para enfrentar el gasto creciente en importaciones de combustibles y los pagos de la deuda.
En tanto, por problemas climáticos, la cosecha de soja próxima a iniciarse aportaría menos dólares que los esperados. El Gobierno parece alejarse de las soluciones que podrían causar el menor daño político y económico.
