Si en las próximas semanas no llueve, el Gobierno podría recaudar mucho menos. Así de simple. Siguiendo la teoría que advierte que el aleteo de una mariposa en Beijing puede ocasionar un tsunami en la costa oeste de los Estados Unidos, si no cae la suficiente agua en sitios clave en las próximas semanas, los ingresos por los impuestos que el Gobierno recauda del sector agropecuario podrían sufrir una importante baja . Ocurre que el fenómeno de La Niña no será beneficioso para la cosecha de este año. Y si la sequía que trae La Niña consigo golpea duramente a la soja, los ingresos fiscales –y los de los productores– se verán mermados.
Sin embargo, no todo está perdido aún. Para el ingeniero agrónomo y experto en climatología Eduardo Sierra, la cosecha de soja todavía puede salvarse. Y con ella buena parte de los ingresos del fisco para este año.
“La soja está con pronóstico reservado, porque se sembró cuando ya había empezado la sequía que trae la Niña”, precisó Sierra. Pero advirtió: “Si, como está pronosticado, llueve la semana entre el 15 y el 22 de enero, la soja se salvará bastante”.
Para la campaña 2010-2011 los pronósticos señalaban que se podrían cosechar unos 55 millones de toneladas de soja, repitiendo así el récord de la temporada pasada. Pero la sequía seguramente impedirá que eso ocurra. “En el mejor de los casos, habrá un pérdida del 10% o 15% de lo proyectado ”, dijo Sierra. De todas maneras, con la suba que vienen registrando los precios de la soja en el mercado internacional, aunque la caída de la cosecha fuera del 20% o 25%, los altos valores internacionales permitirían compensar la caída del volumen.
Los analistas aseguran que incluso con una baja del 25% (que implicaría una cosecha de 40 millones de toneladas), si la tonelada se mantiene a 500 dólares, se podrá alcanzar una facturación de 20.000 millones de dólares, que es más que la cosecha pasada .
Si la Niña puso en pronóstico reservado a la soja, con el maíz fue aún más dañina : lo dejó herido de muerte. La mayoría de los analistas asegura que ya es demasiado tarde para salvar la cosecha de maíz que, por la falta de lluvias, podría registrar una caída del 30% o 40%.
Claro que aún se está lejos de los fatídicos registros de 1988-1989, cuando se perdió el 60% de la cosecha de maíz.
“Hay quienes dicen que para el maíz ya es muy tarde, lo cierto es que está muy golpeado y la caída será bastante importante”, dijo Sierra. Y agregó, contundente: “El maíz dará pérdidas aunque los precios sean buenos”.
Sierra, que es profesor en la cátedra de Climatología Agrícola de la FAUBA, colaborador en la Dirección de Estudios Económicos de la Bolsa de Cereales porteña y director del Departamento de Clima de la Fundación Climagro, asegura que la Niña golpeará con fuerza a esta cosecha porque se trata de un fenómeno muy particular.
“Hay otras sequías que son más duras, pero lo que tiene la Niña es que ocasiona sequía en el núcleo productivo del país, allí donde están las tierras más caras y de mayores rendimientos”. Y, si bien prefirió mostrarse optimista, advirtió que es un fenómeno cada vez más frecuente. “Desde el 2000 hasta ahora tuvimos tres años de el Niño, tres años sin ningún fenómeno y cinco de la Niña”, precisó Sierra.