En los últimos días, Argentina pasó a estar en nombre de todos debido a los anuncios realizados por el presidente Mauricio Macri. La vuelta de las retenciones tuvo una gran repercusión, y como era de esperar, también trajo consigo varios problemas.
En el nuevo informe de Bioetanol elaborado por Claudio Molina, la primera noticia destacada es la siguiente: "La venganza sojera: la trama oculta detrás de la pelea por las retenciones entre el Gobierno y los fabricantes de dólares". Dicha nota, publicada por i-Profesional, explica que el freno a la baja de los derechos de exportación abrió un conflicto con las cerealeras.
"Con los cambios, el Gobierno espera recaudar ingresos extra por $1.500 millones en 2018 y $12.000 millones en 2019. Pero los aceiteros ya le advirtieron al ministro de Industria, Dante Sica, que la iniciativa complicará inversiones y empujará el cierre de plantas, hoy con una capacidad ociosa del 50% por la sequía y con 10.000 empleados en todo el país", resalta el medio en el texto.
Asimismo, La Política Online publicó "Lopetegui rechaza las presiones del campo y mantiene el freno a la baja de retenciones". La nota analiza el mismo tema que el medio anterior, y destaca que "el aumento del dólar compensa cualquier perjuicio que se pueda generar". Luego agrega que "los empresarios, en tanto, hicieron hincapié en que la suspensión de la baja de retenciones a la harina y el aceite de soja va en contra del agregado de valor y de las exportaciones dado que sienta un precedente negativo para las empresas".
Como si las malas noticias fueran pocas, el Cronista no tardó en informar que "en doce meses, la nafta acumula un aumento de 50%". En el texto, redactan que "La petrolera estatal YPF incrementó por segunda vez en quince días los precios de naftas y gasoil, ahora menos de 1%, por la decisión del Ministerio de Energía de subir los valores del biodiésel y el bioetanol para su mezcla obligatoria con combustibles en las plantas refinadoras".
"Los ajustes mensuales en los precios de los biocombustibles son un motivo de disputa en el sector. Como es un valor regulado, el Ministerio de Energía decide en base a una fórmula criticada por los productores de "arbitraria" y publica en el Boletín Oficial los precios en los primeros días de cada mes", resalta el medio de comunicación.
Pero para calmar un poco las aguas, Claudio Molina explica en el diario Clarín, que el bioetanol es una buena alternativa para la transición energética del transporte. El autor afirma que se debe incentivar la producción de este biocombustible, que puede hacer un aporte central para lograr circuitos de movilidad más sustentables.
"Actualmente, se pueden producir en el país cerca de 1,2 millones de m3 anuales de bioetanol. El año pasado, la producción y consumo interno de etanol fue del orden de 1.100.000 m3, con un aporte en términos relativos similar por parte de las destilerías que transforman maíz, y de las destilerías que transforman derivados de caña de azúcar", explica.
Además agrega: " Recordemos que desde abril de 2016, el contenido obligatorio de bioetanol anhidro en las naftas es del 12 % (E12). Por el momento solo se exporta bioetanol para uso combustible en cantidades no significativas, aunque a mediano plazo puede haber novedades al respecto".
Por último, hace hincapié en que los biocombustibles son una excelente opción en la transición energética para el transporte. Incluso, el bioetanol es una alternativa viable para la generación de hidrógeno vehicular, a través de la tecnología SOFC de Nissan.
"En todos los casos, se requieren reglas de juego claras, a largo plazo, con un régimen de promoción sustentable en lo técnico, económico, ambiental y social. Debemos salir de la falsa opción que por estos tiempos se presenta, respecto de la conveniencia de primarizar nuestra economía", destaca Claudio Molina.