Las bajas externas y la intención de las fábricas locales de ajustar sus propuestas a niveles más próximos al valor FAS teórico fueron ayer los fundamentos de la caída del precio de la soja disponible en el mercado doméstico, donde la mayoría de las operaciones volvieron a cerrarse por fuera del ámbito de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).

Por tonelada de soja con entrega inmediata, los compradores ofrecieron $ 2460 para las terminales ubicadas en la costa del Paraná, $ 40 menos que anteayer. Esta propuesta, sin embargo, quedó por encima de los 2385 pesos por tonelada fijados por el Ministerio de Agricultura de la Nación como referencia del valor de mercado.

La soja de la próxima cosecha se mantuvo sin variantes, en US$ 245, para San Martín y para Arroyo Seco. En este segmento del mercado no se descartó alguna mejora puntual, dado que son pocos los vendedores que entregan su mercadería por valores inferiores a los 250 dólares.

En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), las posiciones enero y mayo de la soja perdieron US$ 1,50 y 0,60, mientras que sus ajustes fueron de 293 y de 250 dólares por tonelada.

Las pizarras de la Bolsa de Chicago mostraron ayer bajas de US$ 2,85 y de 2,94 sobre los contratos enero y marzo de la soja, cuyos ajustes resultaron de 383,97 y de 385,17 dólares por tonelada. La caída de los precios de la harina de soja y la toma de ganancias de los fondos de inversión tras las subas registradas por la oleaginosa en las tres ruedas anteriores fueron los principales factores bajistas de la jornada.

Las pérdidas no fueron mayores para la soja por el positivo reporte semanal sobre las exportaciones estadounidenses publicado ayer por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés). En efecto, el organismo relevó ventas por 910.600 toneladas de soja, por encima de las 611.000 t del segmento anterior y del rango previsto por el mercado, de 500.000 a 700.000 toneladas.

Acerca del maíz, la exportación ofreció $ 950 por tonelada disponible para Arroyo Seco y para General Lagos, sin cambios. La mayor disposición de la demanda a elevar sus propuestas se evidenció para el cereal de la próxima cosecha. Tanto es así que por mercadería para Bahía Blanca y para la zona de Rosario se pagaron 138 y 133 dólares por tonelada, con mejoras de 3 dólares, respectivamente.

La Bolsa de Cereales de Buenos Aires indicó que los consumos pagaron entre 960 y 1150 pesos por tonelada de maíz, según calidad, condición, procedencia y forma de pago.

En línea con las nuevas bajas externas, las posiciones abril y julio del maíz en el Matba resignaron US$ 1,80 y 0,60, mientras que sus ajustes fueron de 132 y de 131,50 dólares.

Por tercera rueda consecutiva, los precios del maíz cerraron en baja ayer en la Bolsa de Chicago, donde los contratos marzo y mayo del cereal perdieron US$ 0,79 y terminaron la jornada con ajustes de 155,21 y de 158,55 dólares por tonelada.

A la incipiente crisis que afecta a la industria del etanol a partir de la fuerte caída de los valores del petróleo, y del consecuente efecto bajista sobre el maíz, ayer sumó influencia negativa el reporte semanal sobre las exportaciones estadounidenses que, según el USDA, sumaron 387.600 toneladas, por debajo de las 895.100 t del informe anterior y del rango previsto por los operadores, de 600.000 a 800.000 toneladas.

Respecto del trigo, los molinos ofrecieron ayer entre 950 y 1400 pesos por tonelada, en tanto que la exportación pagó $ 1250 por cereal con ph 78 y un mínimo de 10,5% de proteína para Bahía Blanca. En el Matba, las posiciones marzo y julio del cereal subieron US$ 2 y 1,50, y quedaron con ajustes de 147 y de 159 dólares por tonelada.

La Bolsa ajustó el cálculo sobre la cosecha de trigo

Por la caída de los rindes en los núcleos trigueros del sudeste y del sudoeste bonaerense, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires redujo ayer su previsión sobre la cosecha de trigo 2014/2015, de 11,50 a 11,20 millones de toneladas, cifra que aún se ubica por encima de los 10,10 millones obtenidos en el ciclo anterior. "A la fecha se cosechó el 95,9% de la superficie apta que, con un rinde promedio nacional de 28,2 quintales por hectárea, permitió acumular un volumen parcial de 10,60 millones de toneladas", dijo la Bolsa.
Detalló que en el sudeste bonaerense el rinde promedio se ubicó en 38,1 quintales, levemente por encima de la media de las últimas trece campañas, pero 10 quintales por hectárea por debajo del máximo histórico de la región. "El actual promedio refleja una merma de 4 quintales por hectárea frente a las expectativas iniciales y ello de debe en gran medida a las elevadas temperaturas registradas durante el invierno y al lavado de suelos tras las frecuentes lluvias." Y añadió que en el sudoeste de Buenos Aires y en el sur de La Pampa el rinde actual, de 27,1 quintales, está por debajo de los 29 quintales esperados.