Un insólito escándalo se produjo ayer a la tarde en el SENASA (Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria), cuando sus dos jefes, que acababan de ser desplazados de sus cargos, se enfrentaron a las piñas en plena vereda del organismo estatal.
El presidente, Marcelo Miguez, y el vice, Jose Romero, mantenían un largo enfrentamiento, que hoy se plasmó en una pelea, que arrancó con insultos y empujones. Los funcionarios, ambos ligados a La Cámpora, acababan de enterarse de que no seguirían en sus cargos, tras el desplazamiento de Norberto Yauhar del ministerio de Agricultura de la Nación y la llegada de su remplazante, Carlos Casamiquela. Justamente Casamiquela fue quien ordenó su renuncia.
Miguez, decano de la facultad de Veterinaria de la UBA, volvía al edificio por la calle Belgrano, cuando tomó Paseo Colón y se cruzó con Romero, ex decano de la Universidad Nacional de La Pampa. Allí, hubo insultos, trompadas y hasta cabezazos. La gente que salía del lugar los debió separar.
Desde el Gobierno le bajaron el tono a la pelea. Solo se trató de una “discusión en voz alta delante de mucha gente”.