El ánimo en los productores agropecuarios de base se va crispando a medida que las respuestas oficiales que demandan no llegan. Así se notó ayer en una nueva asamblea convocada por la Comisión de Enlace de Entidades Agropecuarias (CEEA), realizada en la Sociedad Rural de Río Cuarto, Córdoba, y a la que asistieron más de 1000 personas.
El encuentro fue muy rico en cuanto a representatividad, ya que participaron presidentes de sociedades rurales del sur de Córdoba y de las provincias de San Luis, La Pampa y Santa Fe, entre otros, quienes pidieron una "fuerte unidad" de la Comisión de Enlace y que el diálogo con el Gobierno sea en forma conjunta.
Esta es la cuarta asamblea que se realiza este año (las anteriores fueron en Pehuajó; Sáenz Peña, Chaco, y Villaguay, Entre Ríos) para intercambiar opiniones con las bases y tener un diagnóstico de la situación. Aún faltan concretarse las programadas en Tucumán (el lunes próximo), Mendoza, Río Negro y Santa Fe, tras lo cual la dirigencia definirá las acciones por seguir.
"No podemos cargar sobre las espaldas del campo todo el peso de la recaudación impositiva, ni mucho menos el peso del descontrolado gasto público ni el de las desacertadas políticas macroeconómicas", dijo en el encuentro de ayer el presidente de la Sociedad Rural Argentina, Luis Miguel Etchevehere.
El dirigente agregó que el campo no tiene más capacidad contributiva. "Hemos aportado más de 60.000 millones de dólares en concepto de retenciones, pero eso no se ve reflejado en mejores hospitales, en rutas seguras, en mejor educación. Y hoy la producción perdió competitividad, por la inflación y los altos costos en dólares."
Sostuvo Etchevehere que "aquí quedó muy claro que los productores son los primeros que quieren la unidad de la Mesa de Enlace y que los representemos en conjunto". Por su parte, el presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Rubén Ferrero, explicó que "existe una gran necesidad de los productores de movilizarse por la delicada situación que atraviesan con una notoria pérdida de rentabilidad y competitividad que hace que se trabaje muchas veces a pérdida".
Ferrero hizo hincapié en las "políticas erradas que han llevado a la Argentina a marchar a contramano del contexto regional. Los derechos de exportación, las restricciones o prohibiciones de exportaciones y la regulación de precios, juntamente con una fuerte presión impositiva, son herramientas de esta política económica nacional que en vez de incentivar la producción y la inversión tienen resultados opuestos".
Por su parte, Eduardo Buzzi, presidente de la Federación Agraria Argentina (FAA), señaló: "Para los productores agropecuarios, estos diez años de kirchnerismo han sido una década perdida".
En tanto, el presidente de Coninagro, Carlos Garetto, instó a los productores "a seguir participando de las entidades representativas, para hacer escuchar la situación y las necesidades de nuestros pares, hombres y mujeres de campo que trabajan en pos de seguir manteniendo la actividad como el motor de las economías de nuestros lugares de origen". Y concluyó: "Acá no hay diáspora, acá hay unidad de los productores y sus entidades representativas".
A su turno, el presidente de la Sociedad Rural de Río Cuarto, Eduardo Bagni, señaló: "Queremos lograr políticas que nos alejen de la bronca y que nos acerquen a los proyectos".