LA PLATA.- El terrible frente de tormenta, de viento, lluvia y granizo, que castigó al centro de la provincia de Buenos Aires dejó, hasta el momento, el saldo de un muerto, cuatro rutas cortadas por las inundaciones y al menos cuatro localidades aisladas por el agua, en los partidos bonaerenses de Tandil, San Cayetano y Necochea. En todos ellos, además de en Mar del Plata, Quequén, Azul y Laprida, también se habían suspendido las clases.

Al cierre de esta edición, la tormenta avanzaba hacia el conurbano y la Capital y el número de evacuados y autoevacuados continuaba en ascenso.

Por eso, anoche, los equipos técnicos del Consejo Provincial de Emergencias (CPE), que funciona en la órbita del Ministerio de Desarrollo Social, se preparaban para afrontar una dura situación en los cordones más pobres del conurbano.

Además, coordinaban acciones con los ministerios de Justicia y Seguridad, Salud, Infraestructura y Asuntos Agrarios, así como con la Dirección General de Cultura y Educación y la Jefatura de Gabinete bonaerense, para enfrentar la emergencia.

Según los informes del CPE, al cierre de esta edición, permanecían unas 650 personas evacuadas. "El número de autoevacuados no fue registrado, como tampoco los daños ocasionados por la tormenta a los campos y regiones rurales. Ahora nos estamos preparando para ayudar a los distritos del conurbano que podrían verse afectados por la tormenta de mañana [por hoy], dijo a La Nacion el titular del Consejo, Luciano Timerman.

En Tandil un hombre murió tras chocar a causa del temporal. El hecho ocurrió en la ruta 226, a la altura del kilómetro 202, donde la víctima, de 34 años, por la lluvia y el agua que cubría la cinta asfáltica, perdió el control de su automóvil y chocó contra el guardrail de un puente. El muerto fue identificado como Ariel José Molinari, oriundo de Mar del Plata, informaron fuentes policiales.

En Rauch hubo otra muerte en una vivienda de la zona rural, pero las autoridades atribuyeron el deceso a causas naturales.

Caminos anegados

Distintos tramos de las rutas que corren por el centro de la provincia continuaban anoche anegados y en algunos kilómetros el tránsito fue interrumpido. Fue el caso de la carretera 226, que permaneció cortada a la altura de los kilómetros 128 al 130, entre los distritos de Tandil y de Balcarce. Y en el kilómetro 202 entre Tandil y Azul.

También, según los informes del CPE, hubo problemas en la ruta 51, donde el tránsito fue cortado a 10 kilómetros de Saladillo. En la ruta 228, en el distrito de Necochea, en la carretea 75, a la altura de San Cayetano también se cortó la circulación.

En varios distritos, el sector rural sufrió porque los campos quedaron inaccesibles. Es el caso de Pehuajó, donde muchos campos quedaron incomunicados; allí, además, los barrios Belgrano y Deportivo estaban anegados y anoche se producían evacuaciones de vecinos. Se temía, por otra parte, que desbordara la laguna La Salada, que linda con la ciudad y que estaba cerca de alcanzar su cota máxima. Al distrito de Saladillo lo complicó el agua que interrumpió la circulación sobre la ruta 51.

También en Azul, donde las precipitaciones fueron intensas ayer, las clases fueron suspendidas por los efectos del temporal, de lo que se informa por separado.

Aunque hasta el momento el temporal había afectado al centro y el sudeste de la provincia, se mantenía un monitoreo sobre los ríos del norte del territorio bonaerense, ya que el Servicio Meteorológico Nacional pronosticaba que serían los próximos afectados, según el comunicado difundido por esa cartera, a cargo de Martín Ferré. El ministro de Asuntos Agrarios de la provincia, Gustavo Arrieta, sobrevoló ayer los partidos de Carmen de Areco y San Antonio de Areco, junto al intendente de este segundo distrito, Francisco Durañona.

Evacuados desde hace una semana

LA PLATA.- Hasta anoche todavía quedaban 360 personas evacuadas en el partido bonaerense de La Matanza, por el desborde del río Matanza, y 62 en Pilar, donde fue el Reconquista el que se salió de cauce. Según cifras oficiales, también quedaban 42 evacuados en el partido de San Cayetano, 67 en Necochea (50 de ellos autoevacuados) y un puñado en Azul.

También en Mar del Plata y sus alrededores había evacuados: 69 según el último informe oficial. En Laprida, la cuenta ascendía a 25. Y en Lobería, en el sur de la provincia, ocho personas habían debido abandonar transitoriamente sus hogares.