La necesidad de mercadería evidenciada por buena parte de las fábricas locales procesadoras de soja hizo que ayer mantuviera firmes sus ofertas a pesar de las bajas generales registradas en la Bolsa de Chicago, donde hubo una toma de ganancias de los fondos de inversión especuladores y poco ánimo comprador de parte de los operadores genuinos (exportadores, industrias y consumos, entre otros).

Por tonelada de soja con entrega inmediata, las fábricas pagaron 1920 pesos en Arroyo Seco y 1910 pesos en Timbúes, San Martín, San Lorenzo, Ricardone y en General Lagos, sin cambios. En Bahía Blanca la demanda también ofreció hasta $ 1920, pero en ese caso el valor implicó una mejora de 20 pesos.

La soja de la próxima cosecha se mantuvo estable, dado que los compradores pagaron US$ 330 por tonelada en las terminales de San Martín, Arroyo Seco, San Lorenzo y de Bahía Blanca, y US$ 320 en Necochea.

En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), la posición noviembre de la soja retrocedió US$ 1,20 y cerró con un ajuste de 426,60 dólares por tonelada, mientras que el contrato mayo subió US$ 1,10 y terminó la jornada con un valor de 334,90 dólares.

Las pizarras de la Bolsa de Chicago mostraron mermas de US$ 7,63 y de 4,68 sobre las posiciones septiembre y noviembre de la soja, cuyos ajustes resultaron de 634,66 y de 630,16 dólares por tonelada. Las ventas de los fondos y el retroceso del valor del petróleo, que pasó de 97,26 a 96,27 dólares, fueron los factores negativos.

Sin embargo, las quitas no fueron mayores debido al positivo reporte semanal sobre las exportaciones estadounidenses. En efecto, el USDA relevó ayer las ventas de soja en 718.700 toneladas, por debajo del volumen del segmento anterior, de 1.021.800 toneladas, pero por encima de la previsión del mercado, de 500.000 a 650.000 toneladas.

Caída externa del maíz

Como el miércoles, ayer se evidenció un escaso interés de los grandes exportadores por concretar nuevas compras de maíz de la cosecha 2012/2013 en la zona de Rosario. Así, las ofertas abiertas fueron de 205 dólares por tonelada de cereal sobre Lima; 198 dólares en Bahía Blanca, y 190 dólares en Necochea, sin cambios.

La Bolsa de Cereales de Buenos Aires informó que los consumos ayer pagaron $ 780 por tonelada de maíz disponible en Baradero y $ 725 en Chacabuco. Por cereal con entrega en estas plantas entre septiembre y diciembre se ofrecieron US$ 170/175 y US$ 160/165, respectivamente.

En el Matba, las posiciones diciembre y abril del maíz retrocedieron US$ 0,50 y 2,50, mientras que sus ajustes fueron de 180 y de 197 dólares por tonelada.

Fue importante la caída del los precios del maíz registrada en la Bolsa de Chicago, dado que los contratos septiembre y noviembre perdieron US$ 8,46 y 7,87, y terminaron la rueda con ajustes de 318,39 y de 320,75 dólares por tonelada. Las ventas de los fondos de inversión totalizaron durante la jornada 12.000 contratos, equivalentes a 1.524.000 toneladas de maíz. Las posiciones dejadas por los especuladores no fueron tomadas por el resto de los operadores, para quienes los altos precios del cereal socavan los márgenes de rentabilidad, al punto de tornarlos negativos en algunas actividades, como la ganadería vacuna o la cría de cerdos y pollos. E ahí síntomas, lógicos, de racionamiento de la demanda.

Para hoy, el mercado espera un informe de los técnicos del Pro Farmer, que durante la semana recorrieron los campos estadounidenses relevando el estado de los cultivos de maíz y de soja. Los operadores creen que en ese reporte marcarán mayores pérdidas productivas que las ya confirmadas por el USDA en su informe de agosto.

Acerca del trigo, los exportadores pagaron ayer US$ 210 por tonelada con entrega durante el mes próximo sobre San Martín, sin cambios. El trigo nuevo se cotizó a US$ 225 en Bahía Blanca; a US$ 220 en Timbúes, y a US$ 215 en Necochea, sin variantes. En San Martín y en Arroyo Seco, el cereal pasó de 220 a 225 dólares.

Por último, el girasol volvió a subir con fuerza ayer, al crecer de 1650 a 1730 pesos en Rosario, General Deheza y en San Jerónimo.