Después de una semana de paro, tensión y enfrentamientos en las rutas, amenazas a dirigentes y acusaciones cruzadas, funcionarios del Gobierno y directivos de la Mesa de Enlace agropecuaria volverán a verse las caras mañana en el Palacio de Hacienda, en la quinta reunión entre el Ejecutivo y el campo desde que retomaron el diálogo, a fines de febrero. Sin expectativas de discutir una baja de retenciones en ese ámbito, la apuesta de la dirigencia rural pasa por lograr una inmediata ayuda monetaria para los productores afectados por la cruenta sequía que destrozó cosechas en gran parte del país.
Mañana, los ruralistasl serán recibidos por los ministros de Interior, Florencio Randazzo, y Producción, Débora Giorgi, y por el secretario de Agricultura, Carlos Cheppi. A ellos les pedirán agilizar las ayudas prometidas a la lechería y la ganería en los cuatro encuentros anteriores. También, les plantearán la necesidad de contar con fondos frescos para ayudar a pequeños y medianos productores que perdieron todo por la sequía. Un informe de la Bolsa de Cereales de Rosario de la semana pasada dio cuenta de pérdidas en la cosecha de entre 40 y 50% en varias zonas de Buenos Aires, por caso. La situación es similar –o peor–, en Chaco y parte de Santa Fe.
“Hay gente que necesita ayuda monetaria para la subsistencia, porque se jugó toda la plata en la siembra del girasol, o con el algodón, y ha fracasado”, contó Ricardo Buryaile, vicepresidente de Confederaciones Rurales (CRA). “No sólo perdieron plata, sino que se quedaron sin sustento económico como para poder vivir”, dijo.
Un punto que será difícil de zanjar está vinculado a la exportación de la carne. La Mesa de Enlace pide que la Oficina de Control Comercial Agropecuario (Oncca) otorgue los ROE necesarios para exportar de forma automática. Pero el Gobierno suele defender la restricción de exportaciones para mantener abastecido al mercado interno.
A su vez, según consta en una carta que la dirigencia rural envió a Giorgi el viernes, pedirán refinanciar las deudas que productores mantienen con el Banco Nación, consensuar herramientas para lograr la sustentabilidad en la lechería, buscar un espacio para discutir la realidad de cada producto de las economías regionales y otro para “auditar” el cumplimiento de los anuncios vinculados al sector ya efectuados por el Ejecutivo.
Por lo pronto, el fuego cruzado no cesó. Ayer, el presidente de la Sociedad Rural (SRA), Hugo Biolcati, inauguró la quinta edición de la muestra Nuestros Caballos y leyó: “Es hora de sacarnos la careta: el dinero, porque de eso se trata, no lo quieren para redistribuirlo, lo quieren para financiar su proyecto político basado en acumulación de poder y recursos sin límites”.
Al Congreso, en abril
La dirigencia rural seguirá intentando unir a toda la oposición –y a algunos legisladores kirchneristas dudosos– detrás de un proyecto único para bajar las retenciones. A los 108 legisladores que juntaron hace dos semanas atrás en la sesión especial, podrían sumar otros 20, según los cálculos de los ruralistas, y quedarían a un diputado de los 129 necesarios para poder realizar la sesión especial.
Los dirigentes buscan consensuar con el bloque Solidaridad e Igualdad, que lidera Eduardo Macaluse, los diputados que responden al entrerriano Jorge Busti y otros legisladores, cambios en el proyecto de la Coalición Cívica, la UCR y el Pro que enarbolan los ruralistas. Apuestan a convocar a una nueva sesión especial para el 13 de abril.
Y, a pesar de algunos productores radicalizados, coinciden en descartar nuevas protestas en las rutas. La Mesa de Enlace dice, en voz baja, que los piquetes cumplieron su ciclo.