El allanamiento se produjo al inicio del fin de semana, cuando personal de la dependencia de Bromatología Municipal intentó ingresar al lugar para hacer una inspección de rutina y los empleados no los dejaron entrar.

Por tal motivo el Asesor Letrado Municipal, Héctor Miguel Marchesse, recurrió a la justicia para solicitar una orden de allanamiento y así poder ingresar al lugar donde se encontró que varios empleados de la firma carecían de la libreta sanitaria que los habilita para efectuar trabajos manuales con alimentos.

El Dr. Marchesse, comentó que esta inspección se realizó para constatar la salubridad y faena que se realiza en el matadero, siendo que el viernes en horas de la mañana se rubricó, a pedido de Carnes de Victoria S.A. la firma de un convenio por plazo perentorio, para la extensión de la concesión hasta el 30 de noviembre del corriente.

Luego de este pedido de orden deallanamiento «pudimos ingresar con colaboración de la policía, una vez dentro del lugar se constató deficiencias en el trabajo.

Esto no se contradice con el contrato, pero mientras que dure el mismo el frigorífico tiene que trabajar en condiciones normales de salubridad y cumplimiento con las leyes.

Varios integrantes del personal carecían de la libreta sanitaria y otros la tenían vencida, por lo cual se prohibió a las personas continuar con su trabajo hasta obtener la libreta.

También se habló con el representante del Senasa del lugar, y se constataron deficiencias edilicias, anteriormente identificadas, que no habían sido reparadas, por tal motivo se le otorgó sesenta días de plazo bajo apercibimiento de tomar medidas legales que correspondan por no cumplir con lo estipulado».

Diario El Heraldo