Números deficitarios
En nuestro informe anterior comentábamos sobre la pausa que trajo el mes de Febrero a las intensas lluvias con importantes acumulados que dejó el mes de Enero; sin embargo, la región sur pampeana permaneció situada en un escenario ajustado el cual, con el inicio de este segundo mes del año con lluvias escasas, se agravan las deficiencias hídricas a la vez que crece la demanda de los cultivos entrando en la recta final de la campaña.
A modo de referencia de escala local vamos a analizar la ciudad de Tres Arroyos – Buenos Aires. En el mes de Enero el registro de lluvias ascendió a 140.1 mm pero lamentablemente casi el total de este valor se alcanzó en tan solo dos jornadas, la primera el 12/01 y la restante el 24/01. Por otro lado en lo que vamos transitando del mes de Febrero, el registro total alcanza apenas los 7 mm. En el siguiente gráfico mostramos la marcha de las temperaturas Mínimas y Máximas y los acumulados de lluvias para los primeros días del mes de Febrero.
Sin dudas la cantidad de jornadas consecutivas con temperaturas máximas en torno y superiores a 30 ºC, la variabilidad del comportamiento de mínimas acentuadas en los últimos dos días perforando la barrera de los 10 ºC, y la falta de el efecto amortiguador dado por la ausencia de precipitaciones crean un contexto termo hídrico poco favorable para el desarrollo de los cultivos.
Si nos extendemos nuestra observación a escala regional, todos los partidos entran en un contexto desfavorable en cuanto a los acumulados. Cnel. Dorrego, Cnel Pinglés, A. G. Chávez, Puán. Saavedra, Tornquist, Laprida, Bahía Blanca, son algunos de los partidos más representativos donde por ejemplo este último solo acumuló 15.2 mm en enero y alcanza apenas los 3 mm en la primera quincena de Febrero. En términos de distribución de humedad, simulando sobre el suelo una pradera permanente el siguiente mapa presenta la reserva de agua útil para las seis provincias pampeanas al 11 de Febrero de 2019.
Otra semana seca
Lamentablemente las perspectivas para las siguientes jornadas no son alentadoras. Si bien la principal zona tributaria núcleo de nuestro país se favorece con las actuales condiciones de buen tiempo, estabilidad, alta radiación solar y temperaturas en escala ascendente, la zona sur confronta otra semana donde las lluvias son esquivas aumentando aún más la demanda hídrica de los cultivos. Sobre el fin de semana regresa el flujo de humedad y temperaturas del sector norte preparando un escenario para el retorno de las precipitaciones; sin embargo, recién hasta entrada la última década del mes no se concretan las lluvias ampliando la presión sobre los cultivos en torno al inicio de la parte final de campaña.