La sequía del último verano, y que se ha extendido al presente invierno en algunas zonas de Córdoba, sigue teniendo impacto en la producción.

Por ejemplo, es un factor que explica la caída que muestran los valores a los que se están comenzando a pactar los alquileres agrícolas de cara a la próxima campaña.

La primera estimación de arrendamientos que presentó el economista Gonzalo Agusto, de la Bolsa de Cereales de Córdoba, en la agrojornada sobre Soja y Maíz, indica una caída del cinco por ciento.

Lo más llamativo es la aparición de arrendamientos que se pagarán en cuotas mensuales, bimensuales o trimestrales Foto: José Almeida

En promedio, el costo se ubica en 10 quintales de soja por hectárea en toda la provincia, medio quintal por debajo de los valores del año pasado. Como es usual, en los dos departamentos más productivos el valor es más alto: 14,5 quintales en Unión y 16,5, en Marcos Juárez. La caída interanual fue pareja para todas las regiones de Córdoba: entre un quintal más o 1,5 menos.

En dólares, el valor promedio provincial significa 270 dólares por hectárea; casi 50 dólares por debajo de la campaña pasada (319).

Modalidades

Según Agusto, una de las novedades del año son los cambios en las modalidades de negociación de los alquileres.

En el inicio del ciclo, lo que se está observando es un aumento de los que se pactan en quintales fijos, al revés de lo ocurrido en las temporadas anteriores cuando se acordaban más a porcentaje.

Pero lo más llamativo es la aparición de arrendamientos que se pagarán en cuotas mensuales, bimensuales o trimestrales; una modalidad inusual en este tipo de contratos.

De todos modos, Agusto dijo que hay que ser cauto sobre todos estos números, porque la demanda de campos por ahora está poco activa y las proyecciones son preliminares.

Por Fabio Ré/