La superficie destinada a silajes en Argentina se multiplicó por 20 en las últimas dos décadas, a la vez que se incrementó la participación de este forraje conservado en la dieta, pasando de cubrir baches a estar presente durante todo el año en la alimentación del ganado vacuno para producción de carne y leche. Esta evolución fue acompañada por la investigación y el desarrollo de materiales específicos que estuvieran al nivel de las exigencias de los sistemas productivos.
Al momento de elegir un híbrido para silaje, la principal consideración a tener en cuenta es que combine una alta producción de fibra digestible y grano, acordes a las condiciones agronómicas del lote en el que se realizará el cultivo. Esto generalmente no ocurre cuando los híbridos seleccionados para cosecha de grano se destinan a la confección de silajes.
En este sentido, “los maíces de Aptitud Silera de KWS son materiales que fueron sometidos a procesos de selección durante 5 años, con el objetivo de obtener las características deseadas para un silo de calidad” aseguró la Ing. Agr. Estefanía Álgido, del área de Agroservice del semillero.
Algido aseguró que “un primer paso de este proceso es alcanzar, como mínimo, un rendimiento de materia seca de espiga similar al de los materiales graníferos. A continuación, el trabajo se enfoca en que el resto de la planta, que también formará parte del silo, sea de alta calidad. Y para ello la caña y las hojas deberán tener un bajo porcentaje de fibra; y que, a su vez, esa fibra sea muy digestible, para que el animal lo pueda aprovechar y así transformar en carne o leche”.
Otros aspectos fundamentales a la hora de elegir un híbrido para silaje son la ventana de picado, la profundidad del grano y la cantidad de hojas verdes al momento de picado.
Puestos a prueba
Durante 5 años de evaluación en la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad de Lomas de Zamora, se evaluaron los híbridos KM4360 y KM4020. En resumen, el KM4360 presentó valores máximos de materia seca de espiga y mínimos de lignina en 4 de 5 años. Por su parte, el KM4020 presentó valores mínimos de fibra y máximos de rendimiento en espiga durante los 5 años. Esto pone en evidencia la fortaleza del programa de mejoramiento de KWS, y su aptitud silera. También demuestra la gran estabilidad en cuanto rendimiento de materia seca y de calidad que tuvieron durante los 5 años.
Asimismo, estos dos materiales presentaron un destacado desempeño en la evaluación de híbridos para silaje realizada por la AER 25 de Mayo de INTA en la campaña 2015/16. Ubicándose el KM4360 segundo entre 18 materiales en la tabla de posiciones de mayor rinde, con 20.404 kgMS/ha. Y el KM4020 en el cuarto lugar, con 20.135 kgMS/ha.
Si bien cada híbrido tiene su curva de producción de Materia Seca, por poseer espigas Flex (capacidad de compensación), es posible utilizar densidades menores a la media zonal, ya que el híbrido compensará la materia seca y la calidad por hectárea. Esta característica además les confiere una mayor estabilidad frente a condiciones de estrés.
En resumen, aseguró Estefanía Álgido, “los híbridos Aptitud Silera cumplen los siguientes requisitos: alto rendimiento de materia seca en espiga, alta digestibilidad de la fibra, bajo contenido de fibra total, profundidad de grano, alta ventada de picado, hojas verdes a picado, estabilidad de rendimiento, alta conversión del alimento a leche o carne”.
Programa Aptitud Silera KWS
A partir de la experiencia de KWS en semillas para sistemas de producción de carne y leche, nace Aptitud Silera KWS, con el objetivo de obtener y desarrollar híbridos superiores, con características específicas. El programa se desarrolla en la estación de breeding de maíz de Chivilcoy y se evalúa en una amplia red de ensayos, que se extienden desde las zonas de mayor productividad hasta las más marginales. Este programa desarrolla y propone soluciones al alcance del productor, de manera de poder lograr resultados concretos en cada sistema de producción.
El objetivo de KWS en el mejoramiento de maíz para silaje se basa en lograr maíces con alto potencial de rendimiento en forraje de alta calidad en fibra y grano, madurez temprana y un alto grado de estabilidad.
Actualmente KWS comercializa Maíz, Girasol, Sorgo y Alfalfa en Argentina con una red Comercial atendida por 18 responsables Técnicos Comerciales en todo el país.