Se estima que en 2017 la cadena de valor vitivinícola –producción de uva para vino, vino, jugo concentrado de uva, pasa de uva, uva de mesa y turismo del vino– generó valor agregado por alrededor de 38.000 millones de pesos. Así lo indica un informe difundido recientemente por la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar).
“Aproximadamente, un tercio de ese valor lo aportó la producción de uva para vinificar (12.800 millones de pesos). Es importante resaltar esto ya que refuerza la idea acerca de la capacidad de generación de riqueza que tiene la producción primaria, aportando casi el mismo monto de valor agregado que la etapa de comercialización de vino (13.000 millones de pesos)”, destaca el informe.
Por su magnitud, el fraccionamiento y la elaboración de vino en conjunto aportan 1 de cada 3 pesos de valor agregado. Por su parte, el turismo del vino, a pesar de ser una actividad incipiente en relación a las actividades productivas, genera valor agregado por sobre la uva de mesa y la pasa de uva.
En promedio, según el informe, de una hectárea de vid se produjo en 2017 riqueza por 170.000 pesos a partir de la uva, vino, jugo de uva, pasa de uva, uva de mesa y turismo.
El objetivo del estudio realizado por la Coviar es estimar la contribución de la cadena de valor vitivinícola a la economía argentina en el año 2017. Para ello se utilizó la metodología de valor bruto de producción, valor agregado y consumo intermedio, además de estimarse variables como empleo, turistas y aporte impositivo de la cadena. El informe fue desarrollado por el Observatorio Vitivinícola Argentino, la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Cuyo, la Asociación de Cooperativas Vitivinícolas Argentinas y la Corporación Vitivinícola Argentina (COVIAR) con la participación de la Bolsa de Comercio de Mendoza.
“La industria vitivinícola vendió casi 900 millones de litros de vino en el mercado doméstico, lo que significó una facturación de más de 58.000 millones de pesos y cerró el año con un consumo per cápita de 20,3 litros. A su vez, en el exterior, Argentina vendió sus productos vitivinícolas (vino, jugo concentrado de uva, pasas y uva en fresco) por poco más de 953 millones de dólares en 122 países”, detalla el trabajo.
Además, parte del estudio determinó la carga impositiva que soporta el sector vitivinícola de Argentina, definiendo como tal la relación entre el total de impuestos que tributa y el excedente de explotación empresario. “En términos generales, se estima que la vitivinicultura argentina aportó tributariamente al fisco en 2017 poco más de 4.400 millones pesos en 2017”.