Las subas registradas ayer por los precios de la soja en la Bolsa de Chicago no lograron revertir la tendencia de la oleaginosa, que terminó la semana con un quebranto del 1,63%, producto fundamentalmente del retroceso de las cotizaciones del aceite, que concluyó el segmento con una pérdida del 4,18% frente a la posibilidad de que durante 2018 se reduzca el mandato para la mezcla de biodiésel con combustibles fósiles.
Al cierre de los negocios, las pizarras del mercado estadounidense mostraron
ayer alzas de US$ 3,21 y de 3,03 sobre los contratos noviembre y enero de la
soja, cuyos ajustes resultaron de 355,77 y de 359,54 dólares por tonelada. En el
balance de la semana estas posiciones resignaron un 1,63 y un 1,61% frente a los
valores vigentes el viernes anterior, de 361,65 y de 365,42 dólares.
Tras un inicio con bajas próximas a un dólar por tonelada, las subas ayer fueron consecuencia del informe trimestral de existencias al 1°de septiembre del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés), en el que el organismo relevó un stock de soja de 8,19 millones de toneladas, que quedó casi un millón de toneladas abajo de la previsión del mercado, de 9,20 millones.
Vale tener en cuenta -y no perder de vista en plena cosecha- que el volumen
reportado por el USDA para las actuales reservas estadounidenses está un 52,80%
por encima del stock vigente un año atrás, de 5,36 millones de toneladas.
A la caída semanal del valor del aceite de soja, que en Chicago pasó de 749,34 a 718,04 dólares por tonelada, se sumaron durante el segmento las buenas condiciones climáticas para el avance de la recolección de soja en los Estados Unidos, que según el USDA será récord, con 120,59 millones de toneladas. De cumplirse, el pronóstico de temperaturas cálidas y de lluvias por debajo del promedio para las zonas agrícolas aceleraría los trabajos de cosecha de granos gruesos durante el fin de semana, lo que podría resultar bajistas para la apertura de los negocios de pasado mañana.
En otro orden, en Brasil, la consultora AgRural informó ayer que la siembra de soja 2017/2018 avanzó sobre el 1,50% del área prevista, frente al 4,80% de igual momento de 2016 y al 2,30% promedio de los últimos cinco años. En su trabajo, la firma elevó de 34,49 a 34,56 millones de hectáreas su previsión sobre la superficie que será sembrada con la oleaginosa y de 109,70 a109,90 millones de toneladas la proyección de la nueva cosecha brasileña.
Acerca del mercado local de soja, la apreciación del peso respecto del dólar, que superó el 1% al pasar la paridad de 17,39 a 17,21, fue uno de los factores tenidos en cuenta ayer por los compradores para reducir de 4400 a 4350 pesos por tonelada su oferta por la mercadería con entrega inmediata sobre las terminales del Gran Rosario.
Otros motivos fueron la escasez de oferta tras cinco ruedas seguidas con el precio fijo en $ 4400 -en ocasiones, con estas bajas la demanda busca "aleccionar" a los vendedores, que por estos días reclamaban $ 4500- y la estrechez de los márgenes de la industria procesadora, cuya capacidad de pago fue calculada al 28 del actual por la Bolsa de Comercio de Rosario en $ 4225 por tonelada.
La soja de la próxima cosecha, con entrega en mayo, se mantuvo estable ayer, en 260 dólares por tonelada.
En el Mercado a Término de Buenos Aires, las posiciones noviembre y mayo de la soja sumaron US$ 0,40 y 0,30, mientras que sus ajustes fueron de 256 y de 261,80 dólares.
Maíz y trigo
Los contratos diciembre y marzo del maíz subieron ayer en Chicago US$ 1,08 y 0,99, en tanto que sus ajustes fueron de US$ 139,85 y de 144,78 dólares por tonelada. En el balance de la semana, estas posiciones ganaron un 0,49 y un 0,48% frente a los valores vigentes el viernes anterior, de 139,17 y de 144,09 dólares.
Como en el caso de la soja, el dato alcista del día lo aportó el USDA, que relevó las existencias de maíz estadounidense al 1° de septiembre en 58,30 millones de toneladas, por debajo de los 59,77 millones previstos por los operadores. Ese volumen, tomado antes del inicio de la actual cosecha, quedó un 32,14% por encima de los 44,12 millones vigentes un año atrás.
En el mercado local, los exportadores ofrecieron ayer $ 2450 por tonelada de maíz para Bahía Blanca, sin cambios, y $ 2350 para el Gran Rosario y para Necochea, con bajas de $ 50. Por cereal de la próxima cosecha, con entregas entre abril y mayo, las ofertas fueron de 145 a 147 dólares.
Respecto del trigo, la exportación ofreció $ 2950 por tonelada con entrega hasta el 13 de octubre para Bahía Blanca, $ 100 más que anteayer; $ 2900 para el Gran Rosario, con una baja de $ 50, y $ 2850 para Necochea, sin cambios. El cereal de la nueva cosecha se mantuvo en US$ 170 para las descargas en enero. En el Matba, la posición enero subió US$ 0,50 y cerró con un ajuste de 168,50 dólares.