La coyuntura doméstica se impuso ayer a las bajas externas y el maíz
argentino logró un cierre positivo para sus cotizaciones. En efecto, la lenta
normalización de las entregas del cereal oportunamente adquirido y la
acumulación de buques que deben salir en los próximos días impulsó a los
exportadores a elevar sus ofertas para adquirir no sólo mercadería con descarga
en el muy corto plazo, sino grano para entregas diferidas para el período
agosto/octubre.
Por el maíz disponible los compradores pagaron $ 2750 por tonelada para la zona del Gran Rosario y para Bahía Blanca, $ 250 por encima del valor vigente en la rueda anterior. El mayor movimiento de la rueda se generó sobre los negocios con entregas diferidas para el período agosto/septiembre, con un valor de 175 dólares por tonelada para ambos destinos y con una mejora de 5 dólares.
Con menores urgencias que sobre las terminales antes citadas, en Necochea el maíz disponible se mantuvo en $ 2400 por tonelada y la mercadería para entregas diferidas lo hizo en 165 dólares.
"Sólo para la zona del Gran Rosario, durante la rueda se comercializaron
entre 10.000 y 12.000 toneladas de maíz para entregas inmediatas y entre 80.000
y 90.000 toneladas de maíz para las descargas diferidas", informó a LA NACION la
firma corredora Granar SA. Añadió que los compradores necesitan garantizarse un
abastecimiento constante de mercadería dado que durante los próximos meses se
prevé un "agresivo" ritmo de embarques.
En este sentido, según el reporte de carga de buques programada de la Bolsa
de Comercio de Rosario (BCR), en el segmento 21 de julio/20 de agosto deben ser
embarcadas en las terminales de la zona del Gran Rosario 1.083.918 toneladas de
maíz; desde Bahía Blanca, 568.658 toneladas; desde Necochea, 121.150 toneladas,
y desde otros puertos, 61.000 toneladas.
El maíz de la próxima cosecha osciló de 152 a 153 dólares por tonelada para la zona de Rosario y para Bahía Blanca, mientras que se cotizó a 145 dólares para Necochea.
La firmeza del mercado físico se reflejó, asimismo, en el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), dado que las posiciones septiembre y abril del maíz subieron US$ 5 y 2,40, al cerrar con ajustes de 178 y de 154,50 dólares por tonelada.
Lejos del dinamismo interno, en la Bolsa de Chicago el maíz volvió a cerrar con saldo negativo, producto del muy buen estado de los cultivos y de la persistencias de un clima favorable para el desarrollo de las plantas. Al momento de fijar los ajustes de la rueda, las pizarras de la plaza estadounidense mostraron quitas de US$ 0,88 y de 0,69 sobre los contratos septiembre y diciembre del grano grueso, cuyos valores fueron de 130,90 y de 133,65 dólares por tonelada, los más bajos desde septiembre de 2014.
Cabe recordar que con una previsión de cosecha estadounidense 2016/2017 récord, de 369,33 millones de toneladas, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos proyectó el 12 del actual un rango de precios para la campaña de entre 122,04 y de 145,66 dólares por tonelada. Sin embargo, entre los operadores va ganando consenso la posibilidad de que los rindes se ubiquen por encima de los 105,45 quintales por hectárea previstos entonces por el organismo.
Repunte local y externo
Por tonelada de soja disponible las fábricas pagaron ayer $ 4150 para la zona del Gran Rosario, $ 150 más que en la rueda anterior. Además, algunos compradores convalidaron hasta $ 4200, según el volumen, la calidad y el plazo de entrega. A lo largo de la jornada se estimaron negocios por entre 50.000 y 60.000 toneladas de la oleaginosa.
La mejora también se reflejó sobre los puertos de Necochea y de Bahía Blanca, dado que las ofertas de los compradores, de $ 4100 por tonelada, implicaron subas de 100 y de 200 pesos, respectivamente.
En el Matba, las posiciones noviembre y mayo de la soja sumaron US$ 4 y 3,20, mientras que sus ajustes fueron de 289 y de 259,20 dólares.
Tras las fuertes bajas de las últimas dos ruedas, las pizarras de la Bolsa de Chicago mostraron ayer repuntes de US$ 3,58 y de 2,75 sobre los contratos agosto y noviembre de la soja, cuyos ajustes resultaron de 365,05 y de 357,79 dólares por tonelada. El bajo nivel alcanzado por las cotizaciones de la oleaginosa fue casi el único motivo alcista, dado que invitó a que algunos operadores concretaran compras de oportunidad. Por el lado del clima, no hay -al menos por el momento- datos certeros que permitan elucubrar con eventuales daños sobre los cultivos.
Acerca del trigo, la exportación pagó $ 2400 por tonelada para Rosario, $ 100 menos que el lunes, y $ 2300 para Bahía Blanca, sin cambios. El cereal de la próxima cosecha se negoció a US$ 160 para todas las terminales.
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires indicó que los molinos pagaron entre 2350 y 4300 pesos por tonelada de trigo, según calidad, procedencia y forma de pago.
Siguen atrasadas las compras domésticas
En su nuevo informe semanal sobre compras, ventas y embarques, la Subsecretaría de Mercados Agropecuarios del Ministerio de Agroindustria de la Nación relevó nuevas compras conjuntas de la exportación y de la industria por 1.005.500 toneladas de soja entre el 14 y el 20 del actual, que elevaron el total adquirido en el ciclo 2015/2016 hasta los 31.199.900 toneladas, un 14,52% por debajo del volumen comprado un año atrás, de 36.499.300 t.
Del total comercializado, 5.815.600 toneladas, es decir un 18,64%, todavía están sin precio firme. En cuanto a las exportaciones, al 20 del actual fueron despachadas 5.425.000 toneladas de soja, un 30,37% menos que a igual fecha de 2015, de 7.791.100 t.
El organismo agregó que las ventas anticipadas de la campaña 2016/2017 suman 545.100 toneladas, de las cuales un 75,69% fue entregado a fijar.