El ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, ratificó que el Gobierno
bajará las retenciones a la soja, pero no ahora, sino en 2017. Hace diez días,
la Asociación de la Cadena de la Soja (Acsoja) le recordó al funcionario en un
encuentro "la necesidad de concretar la anunciada reducción paulatina de las
retenciones a la soja".
En diciembre, cuatro días después de haber asumido y prometido en la campaña que bajaría 5 puntos por año las retenciones, el presidente Mauricio Macri redujo los derechos de exportación para el grano del 35 al 30 por ciento. En ese momento, además, les quitó las retenciones a las economías regionales, al trigo, el maíz, el girasol y la carne, entre otros productos vinculados con el campo.
Tras el encuentro de Acsoja con Buryaile, comenzó a especularse que el
Gobierno iba a llevar adelante otra quita en este momento tras la disminución
del 5% que aplicó en diciembre último. De hecho, circuló el rumor de que el
presidente Mauricio Macri se reservaba el anuncio para cuando el 30 del actual
participe de la inauguración oficial de la Exposición Rural de Palermo.
Ayer, luego de un encuentro en la Rural junto a referentes de la Mesa de Enlace y el secretario general del gremio de la Uatre, Gerónimo Venegas, al cerrar un congreso internacional de agronegocios, Buryaile contestó -categórico- una pregunta de LA NACION. "No puedo anunciar esto ahora; no puedo anunciar nada, el que decide es el Presidente. El Presidente dijo [en la campaña] que en el 2017 van a ser 25 por ciento", dijo el funcionario.
De este modo, la próxima reducción comenzará a regir para la próxima campaña,
2016/2017, que todavía no se sembró. La cosecha 2015/2016 sigue
comercializándose con la actual tasa del 30 por ciento para el grano.
El ministro señaló que este tema de la rebaja de las retenciones al cultivo
ni siquiera se tocó dentro del gabinete económico, que él mismo integra. "No se
discutió en el gabinete económico", insistió, buscando desmentir incluso
supuestas discrepancias en el gobierno nacional.
Postal distinta
Buryaile estuvo por la tarde con los máximos dirigentes de la Sociedad Rural Argentina (Luis Miguel Etchevehere), de Confederaciones Rurales Argentinas (Dardo Chiesa) y de Coninagro (Egidio Mailland). Todos buscaron mostrar una postal distinta a la que se veía durante el gobierno kirchnerista en la relación campo-Gobierno. Insistieron en que, pese a la persistencia de ciertos problemas, hoy se puede trabajar en conjunto detrás de las soluciones. De hecho, ayer los ruralistas evitaron las quejas duras y procuraron avanzar en propuestas sobre en qué aspectos hay que mejorar para que el agro sea más competitivo, como infraestructura, acceso a mercados, negociaciones internacionales, entre otros.
"Pasamos del enfrentamiento a estar orgullosos de que nos sentemos para solucionar problemas", afirmó Etchevehere. Después, Buryaile retribuyó el gesto de Etchevehere y los otros dirigentes.
Pese a que estaba anunciada la presencia de Federación Agraria Argentina (FAA) al encuentro junto a sus pares de la Mesa de Enlace, la entidad no asistió. Etchevehere dijo que FAA avisó que tuvo un "contratiempo". Por el predio, no obstante, circuló la versión de que FAA, que está haciendo asambleas, quiere "desmarcarse" ya que está con una actitud crítica hacia el Gobierno.
En tanto, Venegas, que llegó con una numerosa comitiva, integrada entre otros , por el legendario ejecutante de bombo "El Tula", llamó a apoyar al Gobierno. "Este gobierno vino a construir, el anterior destruyó", remarcó el secretario general de la Uatre.
Por la mañana, el ministro de la Producción, Francisco Cabrera, también participó del congreso de agronegocios y señaló que el Gobierno se reunirá con los supermercados para evaluar soluciones a la crisis de precios que enfrentan los tambos.