Frente a los pronósticos que surgen de las investigaciones a nivel global que muestran al trigo como el cultivo que podría sufrir los mayores impactos por efecto del cambio climático, un panel de expertos abordó el tema en A Todo Trigo 2015.

Carolina Vera, del Centro de Investigaciones del Mar y la Atmósfera (CIMA) y de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA-CONICET, explicó que frente a diversas fuentes que en muchos casos realizan estimaciones poco confiables, actualmente los modelos matemáticos del clima y las diferentes observaciones del pasado son combinados y evaluados por los expertos.

De allí surge la información que presentó en A Todo Trigo, que se encuentra contenida en la 3° Comunicación Nacional de la República Argentina a la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático. Entre los resultados relevantes de ese trabajo, aparece que entre 1960 y 2010 el aumento de la temperatura media anual en la Argentina fue de 0,5 a 1 grado centígrado, mientras que en el centro del país se registró una leve disminución. En tanto que las olas de calor aumentaron considerablemente en el Norte y el Este, y las heladas disminuyeron en la mayor parte del país.