Quien tenga en cuenta el factor político en la decisión de sus inversiones tiene frente a sí una incógnita difícil de despejar: la propuesta para el campo del principal postulante por el oficialismo, Daniel Scioli.
Los candidatos de la oposición que aparecen en los primeros lugares de las encuestas, Sergio Massa y Mauricio Macri, ya brindaron algunas definiciones sobre lo que harían en caso de ganar en octubre próximo. También se conocen a los referentes del sector que integran sus equipos técnicos.
Sin embargo, el gobernador bonaerense, hasta el momento, no definió su eventual política agropecuaria. Es curioso: Buenos Aires es la principal productora de soja del país (32%), de trigo (61%), y de girasol (53%). En maíz, ocupa el segundo lugar, detrás de Córdoba. Además, concentra la mayoría de las existencias bovinas nacionales ( 33,7 %).
De Scioli apenas se conocen definiciones generales sobre su "apoyo" al campo. En su último discurso frente a la Asamblea Legislativa, en marzo pasado, expresó la necesidad de pasar a una "etapa de desarrollo", de considerar al sector agroalimentario como "estratégico" y de "agregar valor a las materias primas". En esa misma presentación se ufanó de haber "tocado intereses poderosos" como los "pooles de siembra", mediante el revalúo del inmobiliario rural. Esa "voluntad política" no le impidió, sin embargo, contar como oradores a Gustavo Grobocopatel, de Los Grobo, y a Eduardo Serantes, de Cazenave y Asociados, en un seminario sobre desarrollo regional, organizado en octubre pasado por la Fundación DAR, que preside su hermano José Pepe Scioli, y que está considerada como el think tank de su carrera presidencial.
Quienes trabajaron cerca de Scioli aseguran que cada vez que se le presentó un tema conflictivo con el agro lo derivó a sus colaboradores.
Los ruralistas que participaron de la Mesa de Enlace provincial dicen que nunca le escucharon una definición concreta sobre una política conflictiva del gobierno nacional. Los exportadores, que mantuvieron encuentros reservados, destacan que recibió con interés la información que le acercaron, aunque no adelantó nada. Directivos de las principales industrias procesadoras de granos le dijeron que los principales problemas que enfrenta el agro hoy son la "presión impositiva sobre la producción" y el "déficit de infraestructura". De esos encuentros no se llevaron más que definiciones generales.
Sin contacto con el gobernador, los productores bonaerenses que padecieron inundaciones y escucharon anuncios sobre la reconstrucción de caminos rurales, la "ola naranja" les provoca reacciones de ira.
En la Fundación DAR, los temas agropecuarios forman parte del capítulo "desarrollo económico y productivo". Según su página web desarrolloargentino.org, entre los técnicos que trabajan en el área, sólo uno parece tener cierta proximidad con las actividades agropecuarias. Se trata de Ernesto Yacovich, miembro de una familia productora de yerba mate e integrante del primer directorio del Instituto Nacional de la Yerba Mate (Inym), entre otros cargos en la actividad. Eso no quiere decir que no se haya tomado contacto con el agro. Desde hace más de un año, Pepe Scioli y técnicos de la Fundación DAR se reúnen con referentes de la citricultura, fruticultura, el tabaco, el azúcar, la yerba mate y la forestación. Pepe Scioli también se reunió con la Mesa de Enlace nacional, rechazada por el Gobierno.
El principal asesor económico de Scioli es Miguel Bein, quien no es partidario de una devaluación brusca sino de una corrección por vías fiscales del atraso cambiario, como la reducción de los derechos de exportación a las economías regionales o la aceleración de los reintegros.
Respecto de su círculo íntimo, hay quienes temen sobre la influencia de Alberto Samid, vicepresidente del Mercado Central. "Le hace el oído", dicen. Samid juega al ajedrez con el gobernador bonaerense y, dicen, le provee la carne de los asados que se celebran en la quinta de Scioli en villa La Ñata. Otros le restan importancia política al vínculo con el dueño de la red de carnicerías.
Pese a que Scioli nunca objetó una medida del Gobierno, como las trabas al comercio o los derechos de exportación, su lealtad a Cristina y Néstor Kirchner sólo es puesta en duda por los ultrakirchneristas. Cuando el ministro de Asuntos Agrarios, Alejandro Topo Rodríguez, criticó los cupos al trigo, fue fustigado por el diputado Carlos Kunkel. Scioli hizo silencio sobre el tema, pero no desautorizó a su ministro.
Hay quienes creen que no habla específicamente sobre el agro para no irritar a la Casa Rosada. Otros, que su silencio pesa y que puede postergar las decisiones de inversión.
resumen
30%
Devaluación del real
En ese porcentaje se depreció la moneda brasileña desde septiembre pasado y afectó las exportaciones argentinas.