Sólo 24 horas duró en los Estados Unidos la súbita debilidad del dólar frente al euro, tan necesaria para hacer más competitivas las materias primas estadounidenses en el mercado exportador. En efecto, el movimiento descendente de la moneda registrado anteayer ante la posibilidad de que las tasas de interés fueran elevadas a partir de junio por la Reserva Federal se revirtió, en parte, por las dudas que generan las finanzas de Grecia, que ayer contribuyeron para llevar la relación entre las monedas de 1,0879 a 1,0634.
Y como consecuencia del renovado "dólar alto", los granos retomaron la tendencia bajista en la Bolsa de Chicago, en momentos en que avanza la cosecha de soja y de maíz en América del Sur.
Las pizarras del mercado estadounidense mostraron quitas de US$ 1,19 y de 1,10 sobre los contratos mayo y julio de la soja, cuyos ajustes resultaron de 353,39 y de 355,22 dólares por tonelada. También retrocedió la posición noviembre -indicador de la cosecha 2015/2016 en EE.UU.-, que resignó US$ 1,65 al terminar la rueda con un valor de 347,69 dólares.
La fuerte entrada de soja brasileña en el circuito comercial es por estos días uno de los principales factores bajistas para los precios de la oleaginosa. Pero, a su vez, la influencia negativa sobre las cotizaciones se ve potenciado por la debilidad del real, que ayer tocó el nivel más bajo frente al dólar en más de 12 años, al quedar la relación entre ambas monedas en 3,2965. Así, la mercadería del segundo productor global de soja se presenta más atractiva para los compradores.
De igual modo, el inicio de la cosecha de soja en la Argentina, con rindes muy elevados (como se amplía por separado), completa el panorama bajista para los precios.
En el mercado doméstico, las fábricas ofrecieron ayer $ 1950 por tonelada de soja con entrega hasta el viernes próximo en las terminales ubicadas en la costa del Paraná, $ 50 menos que anteayer. En casos puntuales, las fábricas más necesitadas de mercadería propusieron entre 1970 y 1980 pesos por tonelada.
La soja con entrega entre abril y mayo se negoció a US$ 216 por tonelada en la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), sin cambios. También en este caso, algunos compradores elevaron sus ofertas hasta un rango de 220 a 222 dólares. En los puertos del sur, la demanda pagó US$ 222 para Bahía Blanca, sin variantes, y US$ 220 para Necochea, 2 dólares más que anteayer.
En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), las posiciones mayo y julio de la soja perdieron US$ 2,70 y 2,50, mientras que sus ajustes fueron de 223 y de 227 dólares por tonelada.
Maíz y trigo
Los contratos mayo y julio del maíz en Chicago resignaron US$ 0,49 y terminaron la rueda con ajustes de 147,04 y de 150,19 dólares por tonelada. Las exportaciones semanales estadounidenses estuvieron dentro de las previsiones del mercado, por lo que fueron neutras para los precios que, así, siguieron el camino bajista señalado por el "dólar alto".
En la plaza local, los exportadores ofrecieron $ 900 por tonelada de maíz disponible para San Martín y para Timbúes, sin cambios. En negocios puntuales, algunos compradores elevaron el precio hasta un rango de 910 a 920 pesos.
La BCR indicó que por maíz para abril/mayo la demanda volvió a pagar $ 930, mientras que el cereal con entrega entre el 15 de mayo y el 15 de junio se mantuvo en 110 dólares. De igual modo, en Bahía Blanca y en Necochea, el grano grueso se mantuvo en 116 y en 114 dólares, respectivamente.
En el Matba, las posiciones abril y julio del maíz subieron US$ 1,20 y terminaron la jornada con ajustes de 108,70 y de 111,70 dólares.
Acerca del trigo, en Chicago el contrato mayo subió US$ 0,46 y cerró con un valor de US$ 188,13, mientras que en Kansas, la misma posición bajó US$ 1,01 y quedó con un valor de US$ 202,18 por tonelada.
En el nivel local, los molinos pagaron entre 1250 y 1350 pesos por tonelada de trigo. En el Matba, la posición julio se cotizó a US$ 120.