Los productores argentinos y la mayor parte de las compañías proveedoras de
insumos sostuvieron que encararon la campaña de soja 2014/15 con el objetivo de
sobrevivir. Así lo indicó un informe sobre el sector oleaginoso argentino
preparado por técnicos del USDA Foreign Agricultural Service (FAS). "El uso de
insumos es mínimo", sintetizó el organismo internacional.
En este sentido, el informe aseguró que los únicos insumos que registraron un
uso creciente son los herbicidas, dado que la mayor parte de los productores no
pueden prescindir de ellos. "Estudios recientes indican que el costo en control
de malezas representan en algunos casos alrededor del 40% del costo directo de
producción”.
El informe indicó que esta estrategia de supervivencia puede ser necesaria en
un contexto en el cual muchos productores tienen un acceso limitado al
financiamiento.
Sin embargo, en los próximos dos o tres años los costos de producción deberán
aumentar para remediar la degradación del suelo, sobre todo generada por los
bajos niveles de fertilización.
“En el transcurso del año 2015, los actuales precios de los commodities agrícolas combinados con un peso argentino sobrevaluado podrían hacer menos competitivas las exportaciones argentinas del complejo sojero en el mercado internacional”, finalizó el informe.