Por las intensas lluvias, en varias regiones la calidad del trigo cosechado no fue de la mejor. El informe de NODO Sur de Aapresid refleja esta situación.

"Los rendimientos para los partidos de Coronel Dorrego, Tornquist y Pringles estuvieron muy por debajo de lo esperado. Las calidades comerciales en trigo fueron malas con niveles de proteína de alrededor de 9. En general todo esto fue debido al exceso de agua, lo que produjo un fuerte lavado de nutrientes", expresó Javier Irastorza, miembro de la regional Bahía Blanca.

Carlos Rodríguez, técnico de esa misma regional, precisó que las temperaturas mínimas superiores al promedio influyeron sobre el cultivo. Y amplió: "Hubo temperaturas mínimas superiores al promedio y un invierno con pocas heladas (no se juntaron las horas de frío necesarias para la vernalización). Algunas variedades estuvieron más afectadas con un menor número de macollos fértiles". Según el técnico, con las pérdidas de nitrógeno en el cultivo también se redujo el número de espigas. Gastón Therisod, de la regional Azul-Tandil, graficó que por lavado de nitrógeno hubo de 500 a 900 kilos menos.

En la red Twitter, la calidad del trigo fue comentada por productores. Fabricio Calderón (@fabricalde en la red social), gerente de la Cooperativa Agrícola de Ramallo, contó que en la zona "todo" está por debajo del 10% de proteína, "sin calidad molinera". Darío Colombatto (@DarioColombatto) ilustró el caso de un campo en Sierra de la Ventana con 7% de proteína.

En cebada también se registraron inconvenientes con la calidad. Lo consignó Luis Benjamín Banks, asesor del CREA San Cayetano Tres Arroyos. "Las calidades fueron muy variables, con problemas básicamente de proteína y en algunos casos de calibre, transformándose en forrajera con precios sensiblemente menores en el 30% de lo producido. El resto tuvo una calidad aceptable, pudiéndose cumplir con contratos y las ventas a las malterías", señaló el técnico.

Luciano Piloni, técnico de la Regional Tres Arroyos de Aapresid, puso en valores la calidad de la cebada en la región. "Estuvieron muy bajas de proteína, desde 6,5 a 10,5%, con promedio de 9", dijo. Sobre sus rindes, fueron de 3800 a 5700 kilos, con un promedio de 4100. La campaña pasada el promedio había sido de 4600 kilos.

En tanto, Mariano Moro, técnico de la Regional Guaminí-Carhué, describió que en la zona de Bonifacio trigos que el año pasado dieron 5000 kilos esta campaña rindieron 4350 kilos. En tanto, en la región de Arroyo Venado-Erize los rendimientos fueron de 3800 a 4500 kilos, mejor que el año pasado porque se vieron beneficiados por las lluvias y tuvieron un llenado sin grandes golpes de calor.