En la noche de fuertes descuentos en los shoppings se jugaba un diciembre que para la gente de Irsa resultaba el más extraño de los últimos tiempos. Daniel Elsztain, a cargo de esa división de la líder en centros comerciales, se subió a una combi y convertido en un gran ojo nocturno recorrió desde el Abasto al DOT. Los 500.000 tickets superaron apenas 2% a los de 2013 y en plata la facturación fue 35% superior, al compás de la inflación. Salvaron el mes. Lo curioso es que proporcionalmente les fue mejor a los locales del conurbano. Esa área y algunas provincias se convirtieron en un punto de mira en los últimos meses para la Casa Rosada. En base a una estrategia que mezcló a Sergio Berni con política de garrote frente a los manifestantes, a la ex SIDE siguiendo el rastro a cada puntero, con reparto de dinero y comida, hubo fiestas en paz.

¿Se mantendrá ese espíritu durante 2015?, preguntaba la alta gerencia de un grupo empresario que, por temor a represalias del Gobierno, decidió conservar el plantel de empleados. Uno de sus directores en nombre del Estado confesó, en la alegría del brindis, que la agenda de Cristina en 2015 pasa por lo judicial. Y compartió su interpretación del cambio de directivos en la denunciada empresa Hotesur . “Cristina decidió colocar a toda su familia como un mensaje a los jueces. Si atacan a Hotesur, la atacan a ella”, dijo.

Puestos a proyectar, esos mismos empresarios apuestan a un 2015 sin crecimiento que puede ser menos complicado que 2014, siempre que ingresen dólares. Los dólares, coinciden los economistas, no vendrán como fruto de un arreglo con los fondos buitres. “No tienen ganas de negociar. La cláusula RUFO, que se decía impedía la negociación, nunca fue una traba, era una excusa”, disparó Guillermo Nielsen. Cerca de Axel Kicillof contraargumentan que los que no quieren negociar son los buitres. “Vamos a ofrecer las mismas condiciones del canje 2010 a todos los bonistas, no solo a los que tienen un fallo a favor”, señalaron. “Eso no es negociar”, replica Nielsen. Coincide el abogado Eugenio Bruno quien cree que “los beneficios de un acuerdo no le tocarán a este gobierno. Pierden la bandera de pelea contra los fondos y la financiación va a demorar en llegar”, arguye. De fluidos contactos en EE.UU., Bruno afirma que muchos asumieron allá que hay que aguardar al próximo gobierno. No serán, precisamente, las víctimas de la espera a las que dedicó su novela Zama el genial Antonio di Benedetto. Para esa espera estarían preparando artillería pesada, según deslizan abogados de Paul Singer.

Un analista, que suplica el anonimato, prefiere prestar atención al nivel de emisión que escaló al 37% anual y presionará sobre precios y el dólar hacia marzo-abril, justo cuando arrancan las paritarias. Ese es uno de los temas que preocupa a Miguel Galuccio que logró que la nafta no bajara más de un modesto 5% en un esquema que incluye una fuerte rebaja a las retenciones a la exportación de combustible y un subsidio de US$ 3 por barril. Decidido a cortar gastos, el CEO de YPF hasta optó por el hotel Hilton en vez de Tecnópolis para la fiesta de fin de año. Cosas del kirchnerismo, el hotel de Puerto Madero resultaba más barato para una celebración tipo casamiento al compás de los Auténticos Decadentes. En ese frenesí, Galuccio pudo advertir: “Nos viene una tormenta de afuera y la vamos a tener que campear”. Las cosas no pintan mejor en EE.UU. Los planes de inversión en el petróleo no convencional se derrumbaron 35%. Un pésimo indicio para Vaca Muerta.

Por cierto, en el interior el humor económico varía según las localidades. Los pueblos sojeros están que trinan contra el Banco Nación que les cortó préstamos a productores que tenían como moneda de reserva hasta mínimos 100 kilos de soja. Juan Ignacio Forlán, abogado de profesión y en la presidencia del principal banco en su carácter de amigo de Máximo Kirchner, recibió duros reproches del cuerpo gerencial a quienes respondió: “Es una decisión que me trasciende, la tomó Cristina”.

En estos días festivos, la Presidente habría llamado a algunos legisladores para que pase sin sorpresas en Diputados el acuerdo con China, que se aprobó raudo en Senadores. José de Mendiguren asegura que “es poco favorable y tiene demasiadas aristas ocultas. Si hay financiamiento chino habrá adjudicación directa de la obra pública. También, facilidades en materia de permisos de residencia, entre otros acuerdos complementarios que se firmaron y no figuran”. Afirma que vendrán con mano de obra propia y, además de equipos, traerán, como lo hacen en el Belgrano Cargas, hasta los durmientes. Mendiguren califica la relación con China como la que se estableció con España en la colonia.

La Cámara de la Construcción puso el foco en la flamante empresa estatal Playas Ferroviarias, que venderá terrenos del ferrocarril en Liniers, Caballito y Palermo. La manejarán Kicillof y el jefe de la ANSeS, Diego Bossio. Son 74 hectáreas y planean recolectar $2.400 millones para financiar parte del soterramiento del Sarmiento, que tiene demoras de su principal sponsor, el BNDS de Brasil. Algunos sospechan que pueden repetirse precios irrisorios como los pactados por los terrenos fiscales de Santa Cruz.

Pero el Gobierno no se fija en esos “detalles”. De eso sabe Julio de Vido. Ante la imposibilidad de Mariana Matranga, la secretaria de Energía puesta por Kicillof, de convencer a las provincias que no suban las tarifas de luz en el año electoral, De Vido salió al ruedo e impuso a varias el cepo tarifario. Claro que se topó con la resistencia del sindicato y de las cooperativas. Prometió $ 4.000 millones en obras, pero aún no conquistó a Santa Fe, Córdoba, La Pampa, Río Negro, San Luis, Tucumán y Chaco que subirán la luz hasta 32% a partir de febrero.