El presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Luis Etchevehere, advirtió que hay "alarma" en el campo porque con la reforma de la Ley de Abastecimiento, que ya recibió media sanción en el Congreso, el Gobierno quiere "confiscar la producción". Ante al avance del proyecto del oficialismo, ratificó que acudirán a la Justicia para declarar su inconstitucionalidad, en caso de que se convierta en ley.

"El proyecto de ley del oficialismo dice claramente que permitiría la confiscación de la producción", indicó el dirigente rural en diálogo con radio Continental. El presidente de la SRA señaló: "Estamos en alerta los productores porque vemos que quieren crear una herramienta para confiscar la producción de los campos". Según Etchevehere, "hay mucha preocupación, hay bronca" y se lo observa "como un nuevo ataque e intención de un gobierno por entrar a los campos a sacar lo que no le pertenece".

Etchevehere manifestó que "esa es la alarma que hay entre los productores". "La verdad es que en vez de ponerle un GPS a la soja habría que ponérselo a (el vicepresidente Amado) Boudou para facilitarle la tarea a los fiscales", añadió. Según Etchevehere, "hay mucha preocupación, hay bronca" y se lo observa "como un nuevo ataque e intención de un gobierno por entrar a los campos a sacar lo que no le pertenece".

El presidente la SRA reconoció que antes de que Diputados trate el proyecto, "van a ir a hablar con todos los legisladores del oficialismo y de la oposición para que le expliquen a sus votantes que si se aprueba la ley de Abastecimiento se va a terminar la propiedad privada en la Argentina". Luego recalcó: "Si llega a ser sancionada esta ley vamos a recurrir a la justicia para que se declare su inconstitucionalidad". Explicó los perjuicios que -según dijo- ocasionaría la reforma de la ley. "Entendemos que vulnera tres principios básicos. Uno el derecho a la propiedad, el derecho a asociarse para ejercer toda industria lícita y delega facultades judiciales en el Ejecutivo", señaló.

El viernes, Eduardo Buzzi, titular de la Federación Agraria, aseguró que el Gobierno podría declarar de interés público la cosecha de la soja para obligar a los productores a venderla. "Se trata de ver dónde están las reservas para manotearlas en cualquier momento", sentenció. "Retenemos la mitad de la cosecha no por voracidad, sino porque la economía es un desastre", agregó.

Buzzi admitió que los productores retuvieron la mitad de la cosecha porque no tienen confianza en la economía. "No es por voracidad, no es por una intención devaluacionista; el productor retuvo la cosecha en defensa propia porque la economía es un desastre. No se puede invertir, no se sabe qué va a pasar con la inflación ni con el dólar", sentenció.