Por la baja de los precios de la soja en los últimos diez días, la producción de la oleaginosa que aún no se vendió se depreció en casi US$ 1000 millones. Además, la caída complica la rentabilidad de los productores para la próxima campaña, que advierten sobre posibles quebrantos.
El 9 de junio pasado, el precio FOB oficial de la soja actual estaba en US$ 511 por tonelada. Anteayer, rondaba los US$ 480. En un mes perdió 31 dólares por tonelada, o un 6%. En tanto, en apenas algo más de diez días la soja futuro mayo de 2015, que marca el ingreso de la próxima cosecha, retrocedió 5%. Del 27 de junio a anteayer bajó de 291 a 276,10 dólares por tonelada, una merma de casi 15 dólares.
Informes sobre mayores stocks en los Estados Unidos y la confirmación de un considerable aumento de la superficie sembrada en ese país provocaron una generalizada caída en las cotizaciones.
El cimbronazo aquí ya marca un impacto económico. Según un informe del productor Néstor Roulet, considerando que de la cosecha 2013/2014 aún resta comercializar 30.443.200 toneladas, con la baja de 31 dólares en el precio FOB, el país ya resignó divisas por US$ 943.739.200. Para el Estado, la merma por retenciones es de US$ 341 millones.
Para Roulet, la tendencia declinante afecta incluso los números de los productores para la próxima campaña, que se siembra a partir de octubre y cuyo ingreso de cosecha se da en mayo de 2015. En rigor, según el productor, hoy para un modelo de producción en campo propio en la pampa húmeda con el valor para mayo de 2015 a un rendimiento de 3000 kilos por hectárea el productor tendría un quebranto de US$ 5,80 por hectárea. Además de impactar en las cuentas la baja del precio, Roulet advirtió que influye la suba de los costos de producción, que aumentaron 10% en dólares respecto de la última campaña.
Para los productores, hay incertidumbre por la soja no comercializada. En este contexto, especialistas aconsejan vender frente a la posibilidad de nuevas bajas, como se informa en la página 14. Lo recomiendan para adquirir insumos.
"Pensando en que probablemente siga bajando, no tiene mucho sentido seguir guardando si en dos o tres meses hay que tomar la decisión de comprar insumos. Me parece que una parte de la soja la deberían convertir en insumos dolarizados", indicó Juan Manuel Garzón, economista del Ieral-Fundación Mediterránea. "Que haya tanta soja [sin vender] en un escenario declinante hace que el país pierda ingresos", agregó.
Por su parte, el economista Jorge Ingaramo dijo: "No le veo sentido retener". Y advirtió que es "muy fuerte" la caída que tuvo la soja.
Cuentas complicadas
30,4 Millones de toneladas
Es lo que resta vender de la soja 2013/2014. La baja del precio erosiona el valor de ese volumen en casi US$ 1000 millones.
5% Caída
Fue la baja en diez días del precio de la soja mayo 2015, que marca el ingreso de la próxima cosecha. Con costos de producción en aumento, los productores temen que puedan registrarse quebrantos en la próxima campaña.