El Gobierno pidió hoy a carnicerías, frigoríficos, exportadores y productores agropecuarios que hagan volver los precios de la carne a los niveles que tenían en la segunda semana de enero. Según Alberto Williams, de la Asociación Argentina de Carnicerías, el secretario de Comercio, Augusto Costa, lo pidió hoy durante una reunión con referentes del sector.

"Si no lo hacen las partes actoras, el Gobierno va a optar y a tomar medidas porque no puede convalidar los precios actuales", dijo Williams a la agencia de noticias DYN. Desde la segunda semana de enero hasta hoy, la carne se encareció 25% en el mercado mayorista y entre 15% y 20% en el minorista.

El viernes pasado, en coincidencia con la fuerte devaluación del peso, las carnicerías de todo el país comenzaron a recibir la mercadería con subas cada día más fuertes. Los aumentos fueron graduales hasta llegar al 20%. Muchas carnicerías ya los trasladaron a los precios. Otras, lo harán en los próximos días. Y pronostican que en poco tiempo más habría otro 10% de suba.

Estos aumentos encendieron luces de alarma en el Gobierno. Ayer el secretario de Comercio, Augusto Costa, citó de urgencia para hoy a las 11 a toda la cadena de la carne. Seis cortes de carne integran la lista de “precios cuidados”, que incluyen desde la carne picada a la cuadrada.

“Los aumentos aplicados por los frigoríficos ya acumulan 20% en una semana, y empezaron a llegar de inmediato a los precios de venta en mostrador. La semana que viene las carnicerías estarán vendiendo con los nuevos precios”, confirmó Williams a Clarín. El kilo de milanesa de ternera pasó de 60 a 66 o 68 pesos. El kilo de asado saltó de 53 o 54 a más de 60, y el de vacío, de $58 a $63.

Como la carne se exporta, la cotización de la hacienda fluctúa con el valor del dólar. La última semana y al compás de la brusca devaluación, se produjo una suba de más de dos pesos por kilo en el valor del ganado en pie. La variación llega triplicada a las pizarras de las carnicerías.

Entre octubre y noviembre de 2013, poco antes de la renuncia de Guillermo Moreno, la carne había pegado otro salto. En aquellos días, tras varios meses de estabilidad, los principales cortes tuvieron aumentos de entre el 20% y el 40%. El asado, por ejemplo, había pasado de $40 a entre $50 y $56 en los principales supermercados. El vacío había saltado de $45 a entre $60 y $70. El lomo había saltado de $65 hasta casi $100.

Según el último informe de CICCRA, el consumo de carne vacuna aumentó el año pasado un 9,4% hasta llegar a 64,1 kilos anuales por habitante. Lejos de los 90 kilos que los argentinos consumían de carne vacuna en la década del 80.