El Gobierno apunta a garantizar el abastecimiento de los productos del acuerdo de precios en las góndolas de los supermercados, pero en las últimas semanas en la Cámara de Importadores (CIRA) recibieron reclamos de compañías de la industria láctea que no consiguen aprobaciones para ingresar al país insumos claves para la fabricación de manteca, yogures, dulce de leche y quesos.

La natamicina y la goma garrofín son dos insumos claves para la industria y son indispensables para la producción de determinados productos lácteos que no están ingresando al país, según los relevamientos de CIRA. Los importadores también registran demoras en la aprobación de otros bienes de consumo finales, como sardinas, Inca Kola, salmón, vinos, aunque en estos casos tampoco son indispensables para la dieta de los argentinos. Este fenómeno se produce mientras en las últimas semanas creció el nivel de Declaraciones Juradas Anticipadas de Importaciones (DJAI) que ingresan a la Secretaría de Comercio.

El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, mencionó ayer a la mañana la posibilidad de importar tomates, aunque por la tarde tanto del Ministerio de Economía como los supermercados hablaban que esto no está definido. Si el Gobierno efectivamente decide avanzar en este sentido, tampoco implicaría un cambio demasiado drástico con respecto a la situación actual. Marcelo Elizondo, titular de la consultora DNI, aseguró que las importaciones de alimentos e insumos para la fabricación de productos comestibles rondan los US$ 1.000 millones anuales. “El cacao, el café, las bananas, los productos para las fiestas como turrones y ciertos alimentos gourmet también se importan”, manifestó el especialista. Los grandes supermercados y los fabricantes alimenticios más grandes cuentan con más facilidades para ingresar estos productos al país, mientras que los pequeños importadores son los que tienen más dificultades, manifestó otra fuente conocedora del sector.