SAN CARLOS DE BARILOCHE.- El gobierno nacional estudia medidas fiscales para equilibrar el impacto que generará en la fruticultura el incremento de los aranceles que dispuso la Unión Europea, a partir del 1° de este mes.

El sector frutícola padece desde hace años la pérdida de la competitividad y esta nueva medida aplicada por uno de los principales mercados de las peras y manzanas de Río Negro y Neuquén implica que el arancel pase de 4% en manzanas y 5% en peras, a 7,2% para ambas frutas, un impacto cercano a los 10 millones de dólares, según estimaron los exportadores.

Ante este panorama, que la Cámara Argentina de Fruticultores Integrados (Cafi) considera desalentador, el propio gobernador, Alberto Weretilneck, junto con el senador kirchnerista Miguel Pichetto, medió y ayer fueron recibidos por el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich y los ministros de Industria, Débora Giorgi, y de Agricultura, Carlos Casamiquela, a quienes pidieron compensaciones para el sector.

Weretilneck dijo que la medida afecta gravemente a la principal economía regional, ya que los competidores directos como Chile no pagan aranceles a la Unión Europea. "Gestionamos algún tipo de incentivo del gobierno nacional para evitar que esta nueva imposición de la UE perjudique tanto la competitividad de la fruticultura", dijo el gobernador.

Consultado por LA NACION, Pichetto afirmó: "El gobierno nacional tiene varios instrumentos para colaborar" con el sector, y consideró que es "viable poder equilibrar el negocio con un incremento en el reintegro por exportaciones".

Tras la reunión, el senador dijo que "hay un compromiso del jefe de Gabinete en avanzar rápido en un estudio para elevárselo a la Presidenta", quien finalmente tomará la decisión.

Durante la campaña electoral para renovar su banca, el kirchnerista había anticipado el pedido de medidas correctivas al Gobierno para paliar la crítica situación de la fruticultura con la eliminación de las retenciones a las exportaciones, que hoy es del 5%, y la suba de los reintegros del 5 al 20 por ciento.

El primer punto ya lo descartó al señalar que una medida como ésa "generaría presión de todos los sectores", pero consideró factible la segunda propuesta, aunque no aventuró porcentuales.

Además el senador dijo que se debe hacer un "análisis positivo" de la recuperación del precio del dólar, que estimó que llegará a los 7 pesos en febrero y esa valuación repercutiría de modo favorable en el sector frutícola.

El gobierno rionegrino mediará también en el conflicto desatado en la terminal portuaria Patagonia Norte en el puerto de San Antonio Este, principal salida al exterior de la fruta del Valle, ante el reclamo de un 42% de aumento salarial que exige el Sindicato de Obreros Portuarios.

Weretilneck consideró ante LA NACION que es inviable el porcentual pretendido por los portuarios y citó a las partes a reunirse hoy en Viedma para buscar una salida al conflicto.