El 2013 finalizó con 27,4% de inflación, que fue la más alta de los últimos 10 años. Estuvo impulsada por los precios de los alimentos básicos que subieron un 43,1%. El dato surge de la medición que realiza Graciela Bevacqua, la ex directoria del Area de Precios del INDEC, que arroja un valor de casi 6 veces mayor al del INDEC.

Para el cuestionado organismo oficial, la canasta básica alimentaria aumentó apenas el 7,4%, según los números de los últimos 12 meses a noviembre pasado.

En cambio, el informe de Bevacqua señala que el año pasado los precios de los alimentos y bebidas subieron el 32,7%. Pero dentro de ese rubro los alimentos básicos – que entre otros incluye pan, carne, verduras, frutas, fideos, lácteos – tuvieron un alza del 43,1%. Y se especifica que “a pesar que se observaron subas atenuadas en alimentos y bebidas a lo largo del año debido a los acuerdos de precios que impulsó el Gobierno, se pudo observar que en el último trimestre del año, los productos que integran la Canasta Básica tuvieron fuertes incrementos del orden del 18%”.

La secuencia, según Bevacqua fue: en octubre 4,1%, en noviembre 6,2% y en diciembre 6,5%.

Las principales alzas se dieron en el mes de diciembre, en carne vacuna, galletitas, quesos, harinas, arroz, yerba, café, huevos, pollo y pan”.

La conclusión del informe es que “los hogares que se encuentran bajo la línea de indigencia se vieron más afectados que el resto de los hogares en general”. Y esto porque esas familias destinan la casi totalidad de sus magros ingresos a comprar los alimentos básicos.

Según Bevacqua, en promedio el alza de los precios fue del 27,4%, una cifra que casi coincide con el 27,2% que adelantó ayer Clarín en base a los números de CASIA, la entidad que agrupa a los gremios de la alimentación. Desde 2007, cuando se intervino la dirección de precios del INDEC, la inflación es de dos dígitos El año arrancó con una suba del IPC del 3,1% por el impacto del incremento de los boletos de colectivos y trenes que se dispuso a fines de diciembre de 2012. Luego se mantuvo por debajo del 2% hasta junio para, con altibajos cerrar noviembre con un 2,5% y diciembre con un 2,9%.

En diciembre la mayor incidencia en el IPC provino de alimentos que registró una suba “generalizada en todo el capítulo” del 3,9%.

“Las alzas más significativas se dieron en helados artesanales, pan fresco, huevos, galletitas, haría, carnes (vacuna, pollo, cerdo y pescado), azúcar y edulcorantes, quesos duros, sal, pastas frescas, jugos, cacao, fiambres, frutas, manteca y crema, arroz y comidas fuera del hogar”.

El informe dice que si se excluyen los productos estacionales y regulados – que equivalen a más del 30% de los precios del IPC, en diciembre la suba de precios del cerca del 70% restante fue del 3,6%. Eso marca “claramente una aceleración en el proceso inflacionario”, destaca.

Si ese era el panorama a fines de año, en Capital y GBA enero arrancó con un incremento del 66% en las tarifas de los colectivos, a lo que se sumó el alza en los peajes a la costa atlántica y el incremento promedio del 10% en los combustibles. Esto permite inferir que para la región metropolitana el piso inflacionario de enero no sería menos al 3,5%.