La ola de frío polar casi sin precedentes que azota a gran parte de Estados Unidos, con nevadas y fuertes vientos en varios estados y temperaturas que superan los 30 grados bajo cero, podría provocar serias consecuencias en la economía del país. Por lo pronto, el 15% de la cosecha de la región triguera podría perderse y la producción de crudo reducirse debido a que la nieve está afectando el transporte e interrumpiendo las operaciones de perforación.

La zona central y las llanuras de Estados Unidos amanecieron ayer con temperaturas gélidas que no se han registrado en los últimos 20 años, lo que aumenta el riesgo de daños a los cultivos de trigo de invierno y demora el movimiento de granos y ganado a los mercados, dijo ayer Don Keeney, un destacado meteorólogo agrícola del MDA Weather Services.

Un tercio de la región triguera de las llanuras vio daños limitados, mientras que un 15% vio daños significativos, detalló Keeney. Además de las llanuras centrales, la cosecha del sudeste de la región central verá daños mañana (por hoy), debido al pronóstico de que el frío se moverá hacia el sur de Illinois, el sur de Indiana y el norte de Kentucky, agregó.

La ola ártica que atravesó la zona central llevó las temperaturas mínimas a entre -20 y -23 grados centígrados en el principal estado triguero de Kansas, mientras que los estados más meridionales de Nebraska y Colorado vieron mínimas en un rango de -24 a -29 grados. Las temperaturas heladas llegaron tan al sur como el estado de Oklahoma, otro importante estado triguero. Según meteorólogos locales, las sensaciones térmicas alcanzaron los 40 grados bajo cero.

Las capas de nieve protegen al trigo de invierno de los daños debido al frío por al menos cuatro horas cuando las temperaturas caen por debajo de -17 grados centígrados. Los daños pueden llevar a que los cultivos no logren un potencial pleno en el verano siguiente.

El umbral es de -20 grados centígrados, incluso con una capa de nieve, dijo Keeney.

En Kansas, hay una capa de nieve de alrededor de 5 centímetros.

Los comerciantes de trigo están en alerta roja debido a que la caída de las temperaturas complicaría la descarga y el movimiento de barcazas en los ríos de la región central hasta las terminales de exportación del Golfo de México. El ganado también es amenazado por las temperaturas heladas.

El intenso frío también amenaza con reducir la producción de crudo debido a que está afectando el transporte e interrumpiendo las operaciones de perforación.

La producción en Dakota del Norte, el segundo mayor estado productor de petróleo, usualmente cae en invierno debido a que disminuye la perforación y servicios como la fractura hidráulica, que bombea un compuesto de agua, arena y químicos a los pozos.

Pero analistas se preparan para un posible impacto peor que el usual sobre la producción del estado, que potencialmente afectaría las operaciones de compañías como Continental Resources, Marathon Oil y Hess Energy. Estas empresas prefirieron ayer no comentar si cuentan o no con planes de contingencia.

Está tan frío que no pueden producir a plena capacidad, o por completo. Eso impulsaría los precios, dijo Carsten Fritsch, analista de crudo en Commerzbank de Fráncfort.

Los precios del crudo en Estados Unidos (WTI) caían hacia los u$s 93,50 por barril.

En Dakota del Norte la temperatura promedio es de 11 grados Celsius bajo cero entre diciembre y febrero. Para hoy se espera hasta 51 grados bajo cero.

Un año atrás, una tormenta invernal recortó la producción de crudo de diciembre en 4,2%, según la Comisión Industrial de Dakota del Norte.