El Indec de Guillermo Moreno parece tener fecha de defunción. El flamante ministro de Economía, Axel Kicillof, trabaja contra reloj en una profunda "reorganización de toda la estructura" del cuestionado organismo estadístico para volver a devolverles credibilidad a los datos oficiales y cerrar el capítulo de desmantelamiento institucional que cumplirá siete años este verano.
Según pudo saber LA NACION, el Indec es una cuestión clave para el ministro, que siempre apareció incómodo ante la falsificación de los datos de inflación, crecimiento, pobreza e indigencia, entre otros, y que incluso, antes de ingresar a la administración de Cristina Kirchner, elaboraba un indicador alternativo de la suba de precios promediando los índices de siete provincias. "Axel se va a meter de lleno al tema de índices", contaron allegados de Kicillof.
Sin embargo, y aunque el equipo del ministro de Economía trabaja en el tema, las prioridades del equipo de Kicillof son hoy la fuga de reservas y el problema de competitividad que enfrentan muchos actores económicos por la inflación. A su vez, el ministro de Economía estará abocado en los próximos días a las negociaciones para dar por concluido el acuerdo entre YPF y Repsol para solucionar el conflicto desatado luego de la estatización.
Cerca del ministro estiman que el Indec es un tema "complejo" al que se abocará Kicillof personalmente, pero que requerirá algunas semanas de análisis. En principio -según supo este medio- se abarcaría primero el problema institucional y luego el metodológico, que en rigor ya venía siendo trabajado entre el Gobierno y el FMI. El ex ministro de Economía Hernán Lorenzino había programado la salida de un nuevo IPC Nacional aprobado por el Fondo para principios de 2014.
Sin embargo, no trascendieron más detalles sobre el recambio institucional que prevé Kicillof, principalmente sobre el futuro de los directores del Indec, Ana María Edwin y Norberto Itzcovich, pilares de la intervención de Moreno. Tampoco sobre las contrataciones que surgieron luego de la llegada del cuestionado secretario de Comercio Interior y que derivaron, entre otros polémicos ejemplos, en la contratación de dos barrabravas de Chicago.
CALENDARIO
"Están trabajando contra reloj para dar una señal", contaron a LA NACION cuando se consultó sobre quiénes elaborarán el próximo índice de precios al consumidor -la cifra de noviembre- que el Indec publicará, según el calendario de difusión del organismo, el 13 de diciembre, a las 16. Será el primer dato oficial de la inflación calculado bajo la administración de Kicillof y sin la supervisión directa de Moreno.
El Indec fue intervenido en enero de 2007 por orden del entonces presidente Néstor Kirchner. A fines de ese año, el Gobierno intervino la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), que calcula la pobreza, la indigencia y el desempleo, entre otros importantes indicadores sociales. En 2008 el Gobierno discontinuó el IPC Nacional, que Kirchner había impulsado, porque se usaba para revelar la manipulación del IPC-GBA. Desde entonces, casi la totalidad de los datos elaborados por el organismo, incluso el de crecimiento económico, fueron corrompidos por la gente que respondía a Moreno.
En 2010, el Consejo Académico de Evaluación y Seguimiento (CAES), formado por cinco universidades nacionales, estimó que el índice de inflación oficial no es fiable y propuso una reforma institucional urgente y profunda del organismo.
Ese documento -con datos hasta 2009- reveló que de las nueve direcciones nacionales en el Indec siete estaban vacantes (78%). En tanto, del total de 36 cargos jerárquicos casi el 40% no estaban ocupados, lo que situaba al organismo en una cuestionable debilidad institucional. Entre 1995 y 2006, según el CAES, no hubo casi variación en la cantidad de personal del instituto, en torno de 1210 empleados. Pero en 2007 se produjo un crecimiento de la plantilla de un 24,9% -1506 empleados- sin un incremento de la producción.
Los datos oficiales de la Oficina Nacional de Empleo Público (ONEP) afirman que el Indec tenía 1551 empleados a fines de 2012, sólo unos 50 trabajadores más de lo que informó el CAES para 2007. Los trabajadores de ATE Indec desconfían de las cifras oficiales y estiman que actualmente ya hay 1800 trabajadores, contando los tercerizados.
EXPECTATIVA POR EL ENCUENTRO DE LA CONSTRUCCIÓN
El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, y el ministro de Economía, Axel Kicillof, participarán hoy de la 61a. Convención Anual de la Cámara Argentina de la Construcción. En la apertura, prevista para el mediodía en el hotel Sheraton, Kicillof compartirá la mesa con el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri; el presidente de la Cámara, Gustavo Weiss, y el secretario general de la Unión Obrera de la Construcción, Gerardo Martínez. Para el cierre, previsto para las 19, se espera el discurso de Capitanich y la participación del ministro de Planificación, Julio De Vido.
Si bien Capitanich y Kicillof anticiparon al iniciar su gestión que no preven hacer anuncios económicos "grandilocuentes", los empresarios esperan que aprovechen el foro para dar algunas definiciones respecto de la marcha de la economía. Está invitada para el cierre la presidenta Cristina.