Los precios del maíz y del trigo cerraron ayer con resultado positivo en la Bolsa de Chicago, producto de las lluvias que complicaron la cosecha de granos gruesos durante el fin de semana; de la firmeza de la demanda, y de los excesos de lluvias que afectan la siembra de cereales de invierno en la zona del Mar Negro, región que se consolidó como abastecedora global de trigo.
Al momento de fijar los ajustes de la rueda, las pizarras del mercado estadounidense mostraron alzas de US$ 2,36 y de 2,26 sobre los contratos diciembre y marzo del maíz, cuyos ajustes resultaron de 176,86 y de 181,78 dólares por tonelada. Las lluvias detuvieron las labores de cosecha en la porción este del cinturón maicero de los Estados Unidos y se prevén nuevas precipitaciones para el cierre de la presente semana.
Ayer el mercado padeció otra consecuencia de la parálisis del gobierno de los Estados Unidos, dado que el Departamento de Agricultura estadounidense (USDA, en sus siglas en inglés) no publicó el reporte sobre el estado de los cultivos que sale todos los lunes tras el cierre de las operaciones de Chicago. En este sentido, analistas privados calcularon el avance de la cosecha de maíz sobre el 20% del área apta, por encima del 12% del informe oficial del lunes anterior, pero lejos del 69% de 2012 para la misma fecha.
Un portavoz del USDA comunicó ayer que el organismo no se divulgará el informe mensual de oferta y demanda de granos, previsto inicialmente para el viernes próximo, "debido a la cancelación de financiamiento federal". Y agregó que "no se ha decidido una nueva fecha para su publicación". Esta imprevisión del gobierno de los Estados Unidos está generando descontento y una creciente incertidumbre entre los productores (como se amplía por separado).
En el mercado local, y sin la referencia de la Bolsa de Comercio de Rosario, que ayer permaneció cerrada por el feriado en la ciudad de Rosario, en conmemoración de la Virgen del Rosario, los exportadores ofrecieron $ 850 por tonelada de maíz con entrega inmediata, mientras que por cereal de la próxima cosecha propusieron US$ 155.
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires informó que los consumos pagaron entre 870 y 1050 pesos por tonelada de maíz disponible, según calidad, procedencia y forma de pago.
En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), la posición diciembre del maíz se mantuvo estable, con un ajuste de US$ 154,70, en tanto que el contrato abril bajó US$ 1,50 y cerró con un valor de US$ 157.
Acerca del trigo, la posición diciembre en Chicago y en Kansas aumentó US$ 2,85 y 2,30, mientras que su ajuste resultó de 176,86 y de 181,78 dólares. La siembra de trigo de invierno en Rusia y en Ucrania está siendo afectada por excesos de humedad que, según los especialistas, recortaría la oferta del bloque de países de la zona del Mar Negro durante 2014.
El trigo argentino se mantuvo estable ayer, dado que los exportadores pagaron US$ 240 en Bahía Blanca y US$ 235 en Necochea. En el Matba, la posición enero subió US$ 1,50 y cerró con un valor de US$ 240,50.
Respecto de la soja, las pizarras de Chicago mostraron alzas de US$ 0,56 y de 0,74 sobre los contratos noviembre y enero, cuyos ajustes fueron de US$ 476,39 y de 476,57. Ante la ausencia de datos oficiales, fuentes privadas estimaron el avance de la cosecha estadounidense sobre el 22% del área apta, contra el 11% del lunes pasado y el 58% de 2012.
Por soja argentina disponible se habrían pagado ayer $ 1920 y US$ 290 por grano de la nueva cosecha.