La petrolera nacional YPF firmó un acuerdo de inversión con la firma Dow Argentina, subsidiaria de The Dow Chemical Company, para el desarrollo de un proyecto piloto que permitirá la explotación de shale gas en el bloque El Orejano, en la provincia de Neuquén, según informaron desde Telam.
El acuerdo fue anunciado por el presidente y CEO de YPF, Miguel Galuccio, y Jim Fitterling, vicepresidente ejecutivo de Dow, luego de negociaciones iniciadas en marzo tras la firma de un Memorando de Entendimiento entre ambas compañías.
El acuerdo contempla una inversión de 120 millones de dólares de parte de Dow Argentina que será destinado al desarrollo del área "El Orejano", durante un plazo inicial de 12 meses.
YPF, por su parte, dispondrá una inversión en la zona de 68 millones de dólares, lo que totaliza un monto de 188 millones de dólares.
Inicialmente, se realizarán 16 pozos dedicados exclusivamente a la extracción de shale gas, y se estima que en el pico de la producción, el área podría aportar más de 3 millones de metros cúbicos por día.
A partir de este entendimiento, las dos compañías se comprometieron a trabajar en conjunto para identificar nuevos proyectos con el fin de expandir la industria petroquímica argentina en áreas de interés mutuo con foco en la disponibilidad de nuevas materias primas.
Por su parte, Jorge La Roza, presidente de la filial local de Dow, subrayó que "Argentina cuenta con algunas de las reservas de shale gas más grandes del mundo. A través de su participación con YPF para la explotación de estas reservas, Dow amplía su presencia y su aporte al desarrollo económico e industrial del país".
El directivo aseguró que "esta asociación fortalece la posición competitiva de Dow en el país. La liberación exitosa de gas no convencional aquí, con un impacto similar al que tuvo en los Estados Unidos, creará oportunidades de crecimiento para los clientes y para Dow".
La compañía estadounidense no es una productora de energía, sino que está centrada en la producción de insumos químicos y derivados industriales, pero tiene que resolver problemas de disponibilidad de energía para poder asegurar su actividad industrial.
YPF sigue negociando
Aunque la petrolera tenga como prioridad la producción de shale oil en Vaca Muerta junto a Chevron, YPF también tiene en carpeta iniciativas para incrementar la producción de petróleo convencional. En esa lista figura la explotación de Llancanelo, un reservorio de crudo ultra pesado ubicado en Mendoza, que permaneció inactivo durante años por un conflicto medioambiental, según informó el Inversoronline.com.
Emplazado en las adyacencias de la Laguna de Llancanelo, el yacimiento homónimo contiene importantes reservas de petróleo de muy baja gradación API (alrededor de 10°), muy por debajo del crudo Medanito extraído en Neuquén, en torno a los 35°.
El desarrollo del campo, descubierto hace cerca de cuatro décadas por la antigua unidad de Exploración de YPF, exige sortear algunos obstáculos técnicos ligados a la alta viscosidad del crudo y a su alto contenido de metales (vanadio y níquel, entre otros), que demoraron por años su puesta en producción. Sin embargo, recientes declaraciones de Miguel Galuccio, CEO de YPF, dan cuenta de un cambio de escenario. “Estamos perforando un pozo en Llancanelo y tenemos un programa de recuperación terciaria en el campo. Estamos en discusiones con un socio para ver si nos puede apalancar (económicamente) para avanzar”, señaló en el último almuerzo por Club del Petróleo.
El paquete accionario de Llancanelo, que según cálculos que circulan en la industria tendría recursos por alrededor de 300 millones de metros cúbicos (MMm3) de crudo, se reparte entre cuatro empresas: YPF, que cuenta con el 51% y la operación del área; Alianza Petrolera, adquirida por la empresa china Petro AP, con el 29%; San Enrique (10%), controlada por la firma suiza Mercuria; y la local Roch, con el otro 10% restante.
YPF aspira a que la petrolera asiática financie la explotación del proyecto, que no integra hoy sus target prioritarios, relacionados con la explotación de los yacimientos no convencionales de Vaca Muerta y la búsqueda de alternativas gasíferas para frenar la declinación del principal combustible de la matriz argentina. Hace dos años, antes de que el cepo cambiario y el corsé sobre las divisas erosionaran las condiciones de inversión del país, el grupo Mercuria avanzó en la posibilidad de solventar el desarrollo, pero hoy esa alternativa está descartada, según comentaron a El Inversor Online allegados al emprendimiento.
El desarrollo de Llancanelo, agregaron, demandará entre 500 y 800 millones de dólares. La variable técnica parece estar saldada a partir de la inclusión de equipos PCP (bombas de cavidad progresiva), que permiten traccionar el crudo ultra pesado debido a la alta temperatura del hidrocarburo (cercano a los 80°). En el pasado habían fracasado en el bloque compañías de primer nivel con la Unión californiana.
De concretarse, será el primer desarrollo a escala comercial de un yacimiento de petróleo ultra pesado en la Argentina. El interrogante continúa siendo el financiamiento. Más allá de las declaraciones de Galuccio en el Club del Petróleo, en YPF evitaron realizar comentarios sobre la existencia de negociaciones con Petro AP.