Los expertos del Vaticano tendrán que decidir si canonizan al secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, que, por su determinación, hizo crecer en una semana el área sembrada con maíz en un millón de hectáreas. Al comparar los informes de estimaciones agrícolas del Ministerio de Agricultura del 11 y el 18 de este mes se descubren situaciones verdaderamente notables.

Por ejemplo, la superficie sembrada con maíz en Pigüé se incrementó en un 166%; la de Tres Arroyos, un 104%; la de Venado Tuerto, un 87%, y la de Bolívar, un 41 por ciento. Además del milagro, caben otras dos posibilidades: o los informantes del Ministerio de Agricultura se pusieron de acuerdo para dormir una prolongada siesta en los meses de la campaña de maíz o Moreno le quiso regalar una buena noticia a la presidenta Cristina Kirchner antes del comienzo de la Exposición Rural.

Por ese aumento, el cálculo de la cosecha de maíz pasó de una semana a otra de 26 a 32 millones de toneladas. Fue por ese motivo que la Presidenta dijo que el país había alcanzado una cosecha récord de 104,3 millones de toneladas. Es un dibujo verdaderamente innecesario porque la cosecha de maíz, por su volumen total, fue buena y reflejó la rápida respuesta de los productores cuando se había anunciado la liberación de 15 millones de toneladas para la exportación en agosto pasado. Con el fracaso de la campaña norteamericana en 2011/12 no había dudas de que era el año del maíz.

Si esta nueva estimación fuera real deberían otorgarse ROE por 6,5 millones de toneladas extra según admiten los especialistas. Además, tamberos, feedloteros y avicultores deberían saltar en una pata porque de una semana a otra la oferta de maíz creció en 1,6 millones de toneladas. Y no están precisamente contentos estos sectores últimamente. El mercado, además, ni se mosqueó con el crecimiento súbito de la cosecha anunciado por el Gobierno.

Esa contabilidad creativa, además, institucionalmente significa un nuevo retroceso para el Ministerio de Agricultura, que cede a las presiones de Moreno en la confección de las estimaciones agrícolas. Le abrió la puerta para que creara un Indec de los granos.

Esto no debería sorprender teniendo en cuenta que el responsable del área, Norberto Yauhar, está más preocupado por su candidatura a diputado por Chubut que por hacer respetar las evaluaciones técnicas. Las patinadas de Yauhar se van acelerando. Hace una semanas dijo: "Hace falta a veces que uno se ponga con el látigo en la mano para que el trigo aparezca". El trigo bajó por unos días, pero volvió a subir. También declaró, ante una pregunta de una periodista de una radio comunitaria de la Patagonia, que "muchos pueblos originarios se estaban llenando de plata con la soja". Más tarde intentó aclarar esa afirmación al dar detalles sobre el apoyo del Ministerio a las distintas comunidades originarias, pero sus palabras fueron ésas.

Dibujar números y formular declaraciones fuera de lugar es como jugar con fuego mientras hay un incendio cerca. Chicago dejó de reflejar en los últimos días las bajas existencias de soja en los EE.UU. y se paró sobre la realidad de la nueva cosecha que, hasta el momento, promete ser muy buena. Si a eso se le agrega que, por la política monetaria de la Reserva Federal de los EE.UU. el dólar se está apreciando, las perspectivas de precios para la oleaginosa para el ciclo 2013/14 no son las mejores. Aunque la Presidenta crea que las noticias que no son positivas forman parte de una "cadena del desánimo" alguien debería presentarle los datos duros de forma sincera para que tome las previsiones correspondientes. Las condiciones estructurales se mantienen por la sólida demanda internacional de alimentos, pero el mercado de granos, en el que los fondos de inversión y especulación tienen una influencia decisiva, es volátil.

Esa misma incertidumbre existe con el trigo. Hasta que ingrese la próxima cosecha continuará la escasez de mercadería, sobre todo de calidad. Los molinos chicos, a diferencia de los grandes, no pueden vender la bolsa de harina a 200 pesos. En estos casos, el riesgo de la concentración aumenta. Paradojas de un gobierno que se considera a sí mismo como progresista.

"El problema del trigo se soluciona con más trigo", recuerda el corredor y analista del mercado de granos Javier Buján. Esto es lo que no comprende el Gobierno desde 2006, cuando comenzó la intervención en el mercado de trigo. Moreno está convencido de que puede administrar precios y cantidades de los productos de la economía a voluntad, prescindiendo del comportamiento de los diferentes agentes e intereses que confluyen en un mercado. Su gestión ni siquiera es evaluada en términos políticos porque pocos meses antes de elecciones legislativas, que serán decisivas para el oficialismo, consigue que el precio del pan y del resto de los productos de la molinería se vaya por las nubes.

Por eso hoy, el presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Luis Miguel Etchevehere, en su primer discurso como titular de la entidad en el acto inaugural de Palermo, pondrá énfasis en señalar el fracaso del Gobierno en defender "la mesa de los argentinos". Nunca como en estos años se ha hecho tanto como para perjudicar por partes iguales a productores y consumidores en un país superavitario en la producción de alimentos. En un período de precios internacionales como pocas veces se recuerda en la historia es algo más que una oportunidad desaprovechada.

resumen

1,2

Millones de hectáreas

Alcanzaría la superficie sembrada con cebada según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.

la frase

"Es indignante la suba de la leche y la caída de las exportaciones de carne"

Gerónimo Venegas

Sec. Gral. de Uatre