La situación que atraviesa la Argentina en el orden político – institucional,
económico, cultural y social requiere por parte de la comunidad y sus órganos de
representación un compromiso activo e irrenunciable destinado a rescatar al país
de una decadencia que amenaza su futuro como Nación.
Con la plena convicción de que sólo la plena vigencia del sistema
REPUBLICANO, REPRESENTATIVO FEDERAL que consagra la CONSTITUCIÓN NACIONAL hará
posible la recuperación del país, la Confederación de Asociaciones Rurales de
Buenos Aires y La Pampa (CARBAP) quiere hacer un aporte concreto al debate de
ideas y propuestas que la sociedad deberá tener presentes a la hora de decidir
su voto en las próximas elecciones.
Nuestra entidad, representativa de 114 sociedades rurales de Buenos Aires y
La Pampa y fiel a sus convicciones en pos de la libertad y dignidad del campo
argentino, pone a consideración de las fuerzas políticas, los medios de prensa y
la ciudadanía una propuesta integral sobre la política que sería necesaria para
superar la grave coyuntura que vive el país en su conjunto y el sector
agroalimentario en particular.
Esta propuesta se funda en el convencimiento de que hay un proyecto
alternativo al actual modelo, que ha sido implementado en los últimos años por
los países exitosos, tanto en nuestra región como en el resto del mundo,
logrando notables mejoras en el bienestar de sus habitantes, atrayendo
inversiones productivas, creando fuentes de trabajo genuinas, y aprovechando la
excelente oportunidad que ofrece un mundo necesitado de alimentos para una
población cuya demanda alimentaria aumenta constantemente tanto en cantidad como
en calidad.
Con la premisa de que es posible lograr en forma simultánea una tasa elevada
de desarrollo económico con un alto nivel de integración social, priorizando las
inversiones y el crecimiento armónico del interior productivo, CARBAP presenta
en este documento una serie de propuestas cuyos principales aspectos, partiendo
del respeto irrestricto a la Constitución y a las instituciones de la Nación,
pueden sintetizarse en los siguientes puntos:
1) Promoción del equilibrio regional, alentando las posibilidades de
desarrollo y la radicación de la población en el interior del país. Generación
de una moderna, equitativa y eficiente relación fiscal Nación- Provincias.
2) Defensa del valor de la moneda y la estabilidad de precios a través de la
independencia del Banco Central, el respeto a la seguridad jurídica de los
inversores y el cumplimiento de los compromisos por endeudamiento público.
3) Normalización del funcionamiento de todos los mercados y sistemas
información estadística y de comercialización de productos agropecuarios, en un
marco de libertad, transparencia y seguridad jurídica.
4) Promoción de la inserción competitiva de la Argentina en el mundo,
asegurando políticas de Estado que atraigan a largo plazo inversiones externas e
internas orientadas al desarrollo económico y social.
5) Política cambiaria que permita el normal desempeño de los sectores
eficientes y competitivos de la economía. Eliminación del control de cambios y
de las restricciones a operar en moneda extranjera.
6) Procurar la plena vigencia de los principios fundamentales del Tratado de
Asunción, gravemente distorsionados a través de mecanismos de comercio
administrado que conspiran contra el proceso de integración regional y el
efectivo funcionamiento del MERCOSUR
7) Política tributaria basada en la plena vigencia del principio de Legalidad
(“No hay tributo sin ley”), el respeto por el Federalismo, la igualdad ante la
ley, la no confiscatoriedad, la proporcionalidad y la equidad. Derogación de los
derechos de exportación, simplificación del sistema tributario y eliminación de
los impuestos distorsivos.
8) Creación de mecanismos de desgravación que promuevan el cuidado de los
suelos y la recuperación de sus nutrientes.
9) Desarrollo de un sistema nacional de transporte que integre armónicamente
el componente fluvial, ferroviario y carretero.
10) Promoción de un programa de subsidio a la inversión privada para el
acceso a las redes de energía comercial de los usuarios rurales. Desarrollo de
una adecuada infraestructura de comunicaciones en las zonas rurales con el fin
de mejorar la calidad de vida de la población rural y facilitar las
transacciones comerciales.
11) Adaptación de los regímenes laborales a fin de adecuar los sistemas de
contratación de mano de obra a las características de la producción
agropecuaria. Política transparente y activa de fiscalización del cumplimiento
de dichos sistemas de contratación, orientada a la desaparición del trabajo en
negro. Promoción de proyectos generadores de empleo en las ciudades del interior
como instrumento de desarrollo regional.
12) Empleo de tarjetas inteligentes para asistir a los sectores de menores
recursos, con subsidios explícitos al consumo alimentario, asegurando la
transparencia y eliminando el clientelismo.
13) Reconocimiento del Estado como estructura social al servicio del bien
común y elemento fundamental para el pleno despliegue de las potencialidades
materiales y espirituales del hombre, en el respeto irrestricto de su dignidad y
libertad.
14) Pleno respeto a los derechos individuales –a la vida desde la concepción;
a la libertad e integridad de la persona; a la libertad de conciencia; a la
autodeterminación de la familia; al derecho exclusivo de los padres para la
educación de los hijos; a la libre exteriorización de la propia opinión; a la
libre asociación y a la cooperación en la configuración y gestión del bien común
– fundando el ejercicio del poder en los principios que alumbraron el nacimiento
y organización de la Nación, sintetizados en el Preámbulo de la Constitución
Nacional.
15) Garantizar el respeto al derecho de propiedad, a la libre iniciativa y al
libre ejercicio de la actividad económica, de acuerdo con el principio de
Subsidiariedad como sustento de la libertad y de los intereses individuales en
el seno del ordenamiento del bien común.
16) Instrumentar un régimen de meritocracia para el acceso a los cargos
públicos de nivel no político.
17) Mejora de los mecanismos de representatividad y participación de los
ciudadanos, asegurando sin discriminación la provisión eficiente, eficaz y
económicamente sustentable de los Bienes Públicos. Eliminar la discrecionalidad
en el diseño y la ejecución de las Políticas Públicas, procurando la máxima
transparencia en el accionar gubernamental.
CARBAP, como parte del movimiento rural confederado, se siente profunda y
solidariamente comprometida con el desarrollo pleno de las comunidades del
interior. La entidad considera que en un país como Argentina resulta inadmisible
que la persistente aplicación de políticas desacertadas postergue la posibilidad
de que millones de compatriotas puedan acceder a mayores niveles de bienestar.
Esta lamentable situación debe revertirse urgentemente, en pos de un país capaz
de generar condiciones de vida dignas para todos sus habitantes.
Nuestra propuesta es un llamado acuciante a la generación de un marco institucional de alta calidad, con reglas de juego estables que alienten la inversión, la incorporación de tecnología y el crecimiento de la producción y la productividad en las distintas cadenas agroalimentarias. Esto permitirá liberar y potenciar nuestras condiciones productivas y ventajas competitivas, favoreciendo el desarrollo integral del sector, contribuyendo al bienestar general y posibilitando al país cumplir con la responsabilidad moral que implica aportar una mayor oferta de alimentos para un mundo que los demanda en forma creciente.
Por Arturo Navarro
Fuente: Años de Campo