Se abordó la situación actual de los cultivos y su futuro inmediato a días de la nueva campaña. Nuevas variedades de semillas de trigo y cebada, y los excelentes resultados logrados con el tratamiento de semillas Vibrance Integral y el fungicida Reflect Xtra alientan las expectativas de los productores.

El trigo sigue siendo un cultivo vital para la alimentación, importante para la sustentabilidad del sistema y clave para una rotación equilibrada. Con tecnología y buenas condiciones ambientales es capaz de superarse y sorprender. Por su parte, la cebada ha ido ganando espacio en los campos argentinos hasta transformarse en la gran protagonista de los cultivos de invierno. Los cereales han evolucionado y el uso de la tecnología en semillas y productos para la protección del cultivo ha multiplicado sus rindes promedio en los últimos seis años. Estas tecnologías han calado muy profundo en la forma en que se produce en el campo. “Desde Syngenta contribuimos y acompañamos esa evolución con nuevos y mejores trigos, a través de convenios realizados con la empresa Buck, y nuevas cebadas como el caso de Scrabble, desarrollada con Ab Inveb para Maltería Quilmes. Además, en los últimos dos años lanzamos Vibrance Integral, Reflect Xtra y tenemos en trámite de registro Vibrance Gold y una nueva formulación de Amistar Xtra, que incluye un novedoso coadyuvante que lo hace más potente. Hemos lanzado en Europa la primera cebada híbrida forrajera de alto rendimiento, superando en un 20% los rendimientos actuales”, sostuvo el Ing. Agr. Horacio Silva - Head Cereals & Special and Local Crop de Syngenta, dejando en claro el compromiso de la compañía con la producción.

Al respecto, el Ing. Agr. PHD Daniel Miralles de FAUBA comparó la situación de los cultivos precisando que en los últimos años el trigo ha sufrido una reducción de la producción de 350.000 tn/ año, y la cebada un incremento de la producción de 640.000 tn/año. “Hasta los años 90 el trigo y la cebada tenían rindes similares en el orden de los 1.600kg/ha; hoy estos cultivos triplicaron esos rendimientos en promedio”, sostuvo.

Refiriéndose a la campaña 2012, Miralles explicó que estuvo caracterizada por restricciones de tipo abióticas, con excesos hídricos en las primeras etapas del cultivo, temperaturas muy bajas en el momento de la siembra que retrasaron la germinación y nubosidad elevada, y restricciones del tipo bióticas, con enfermedades foliares desde el arranque. Este escenario favoreció el desarrollo de manchas foliares que perduraron durante todo el ciclo del cultivo reduciendo la capacidad de interceptar la radiación. En muchos casos, llegado el momento del llenado de granos, la insuficiente área foliar desencadenó un segundo mecanismo que consistió en la removilización de nutrientes desde el tallo, con la consecuente pérdida de estructura y posterior quiebre y vuelco de espigas.

Novedades en semillas

En cebada se presentó Scrabble, la nueva variedad de cebada cervecera que comercializará Maltería Quilmes. “Se trata de un desarrollo conjunto entre Syngenta y Ab Inveb. Tiene muy alto potencial de rendimiento, es resistente al vuelco, tiene un ciclo de cultivo similar al de las variedades actuales, y excelente perfil sanitario. Según ensayos realizados en el INTA Balcarce en la temporada, Scrabble alcanzó rindes de 8.000 kilos/ha contra los 6.800 kg/ha de Andreia, la segunda en rindes, y con excelente calibre”, explicó el Ing. Agr. Antonio Aguinaga de Quilmes.
Al tratar Scrabble con el tratamiento de semillas Vibrance Integral se logró un 10,2% más de plantas, con mayor volumen de raíces. Otra de las claves para lograr rindes superiores fue controlar el complejo de enfermedades con los fungicidas Artea, Reflect Xtra y Amistar Xtra. En ensayos realizados según los protocolos de Syngenta en cuanto a nutrición y control de enfermedades, se alcanzaron rendimientos de entre 9 a 12mil kg/ha.

En trigo, el Ing. Agr. Lizardo González de Buck Semillas presentó los nuevos materiales que salen al mercado. Se trata de las nuevas líneas SYN 110, SYN 100, SYN 200 y SYN 300 que combinan rendimiento con una excepcional capacidad de adaptación a diferentes ambientes. Syngenta y Buck Semillas tienen un acuerdo de colaboración en virtud del cual Syngenta aporta genética utilizando plataformas tecnológicas líderes y su amplio know-how para desarrollar nuevas y mejores variedades de trigo.

Malezas antes de la fina

Si bien los avances tecnológicos impulsan a los cultivos hacia nuevas fronteras productivas, en los últimos tiempos el problema de las malezas resistentes y tolerantes parece ponerle un palo en la rueda al avance de la producción. Según el Ing. Agr. Juan Carlos Papa del INTA Oliveros, esta situación tiene varias causas y presenta un escenario complejo. Sin embargo explicó que el 90% de las malezas pueden ser controladas con tratamientos oportunos. Alrededor del 10% son realmente tolerantes a glifosato, de las cuales el 9% se pueden manejar con otros principios activos. Entre las malezas con resistencia a glifosato confirmadas están: sorgo de Alepo, raigrás anual y perenne, capín, gramilla mansa y pata de ganso.

Entre las sospechosas se encuentran: rama negra, quínoa, yuyo colorado, Digitaria insularis, Urochloa panicoides. “Se puede mitigar el problema asumiendo una actitud proactiva, reconociendo que las malezas no pueden controlarse sólo con un herbicida, sino que es necesario el empleo racional de todas las herramientas químicas y no químicas disponibles, reconociendo la naturaleza biológica del problema que trasciende una campaña puntual, e implementando un manejo integrado de malezas para aumentar la diversidad”, remarcó el Ing. Papa.

Mesa de monitoreadores

Para generar un espacio de intercambio de experiencias y evaluación sobre cómo afectaron las enfermedades a los cereales durante la complicada campaña pasada, se convocó a una mesa de monitoreadores de la que participaron los Ing. Agr. Rita Robledo, Diego Álvarez, Santiago Barberis, Ariel Quattrocchio y Esteban Bilbao, todos bajo la coordinación del Dr. Jorge González Montaner de CREA Mar y Sierras. Estos técnicos trabajaron sobre campos situados en Lincoln, Pehuajó, Carlos Casares, Bolívar, Pergamino y sur de la provincia de Buenos Aires, en un año con abundantes precipitaciones -que en algunos casos superaron los 400 mm caídos entre agosto, septiembre y octubre.

Todos coincidieron en que las enfermedades necrotróficas lideraron la toma de decisiones. El gran problema fueron las manchas. En cebada, mancha en red (Drechslera teres) y en trigo mancha amarilla (Drechslera tritici-repentis). Más tarde aparecieron las royas (Puccinia hordei y Puccinia recondita) y septoria (Septoria tritici). En cebada la sorpresa la dio Ramularia, que en algunas zonas fue identificada tarde generando graves daños.

El debate entre los monitoreadores dejó muchas preguntas interesantes para responder, entre ellas cómo depositar el principio activo de un fungicida si el mesófilo (el tejido que constituye la mayor parte de las hojas de la planta) está totalmente destruido por un patógeno; o el peligro latente que representa la enfermedad Bipolaris sorokiniana que en muchas casos se confundió con Ramularia. Esta enfermedad, por ahora con baja incidencia, puede atacar fuerte a la cebada en las próximas campañas.

Más tarde el Ing. Agr. Alejandro Falabella, del área de marketing de Syngenta, presentó el portfolio de productos para cereales destacando el nuevo Reflect Xtra que combina el nuevo principio activo Isopyrazam, del grupo químico de las carboxamidas, con la azoxistrobina, del grupo químico de las estrobilurinas. Reflect Xtra es muy efectivo en el manejo de enfermedades de cebada, especialmente para variedades sensibles, controlando mancha en red (Drechslera teres), roya (Puccinia hordei) y mancha borrosa (Bipolaris sorokiniana). En trigo controla mancha amarilla (Drechslera tritici-repentis); roya (Puccinia recondita) y Septoria (Septoria tritici).