Informe esencialmente NEUTRAL. Prácticamente sin cambios en los niveles de oferta sudamericana de soja. El USDA recorta un millón de toneladas a la su estimación de producción argentina, dejándola en 53 millones, mientras que aumenta la de Brasil en igual proporción, ajustándola a 83,50 millones de toneladas. Consolidándose el país vecino como primer productor y exportador mundial de soja. Asimilados los datos del reporte la atención se concentrará en los pronósticos climáticos de las próximas semanas con lluvias escurridizas y muy necesarias.

Por otro lado, en el balance de soja norteamericana el USDA aumentó levemente la molienda doméstica, 270 mil tns, asumiendo un ritmo mayor de crushing al pronosticado, considerando la firmeza de los márgenes de la industria y el acelerado ritmo de las exportaciones de subproductos con Argentina prácticamente retirada de mercado. Las ventas de harina de soja estadounidense superan en un 43% a las del año previo para esta época, mientras que en el caso del aceite el incremento es todavía más impactante y el acumulado de exportaciones supera en un 242% al de la campaña previa. Los stocks finales se ajustaron en igual proporción, pasando de 3,76 a 3,40 Millones de tns. Sin cambios en las exportaciones, por el momento.

Sin sorpresas tampoco para los cereales. En el caso del maíz, el USDA también recortó su estimación de producción en 1 millón de tns, informando 27 millones de tns. Asimismo, aumentó la brasilera de 71 a 72,50 millones de tns, aunque quedando todavía lejos del estimado de la CONAB de 76 millones. Para EEE.UU, se recortaron las exportaciones, haciendo eco del aletargado ritmo de ventas semanales que se reportan, mientras que se aumentó levemente el uso de maíz para forraje en 500.000 tns. Los stock finales quedaron así con una leve suba de 760 toneladas, ajustándose a 16,06 millones de toneladas.

El más favorecido por los números del USDA fue el trigo, aunque es el producto que tiene la menor correlación de precios con el mercado interno. En este caso el USDA aumentó más de lo esperado el uso de este cereal en las dietas forrajeras domésticas, sumando a este consumo casi 700.000 toneladas que se descontaron de los stocks finales norteamericano. Los precios altos del maíz, tras una cosecha de rendimientos decepcionantes, afectan colateralmente la demanda de trigo. Sin cambios en las exportaciones norteamericanas.

Del balance mundial destacamos el recorte de Kazajstán de 10,50 a 9,84 millones de toneladas y de Brasil, uno de los principales importadores con 7,70 millones de tons, de 4,80 a 4,30 millones.

Por C.P. María Sol Arcidiácono - Analista de Mercados- INTAGRO S.A
Fuente: Salvador Di Stefano