La soja volvió a negociarse ayer con importantes bajas en la Bolsa de Chicago, producto del rápido avance de la cosecha estadounidense; de la liquidación de contratos por parte de los fondos de inversión, y del buen clima que se registra en América del Sur para el inicio de la siembra 2012/2013. Las bajas externas también se reflejaron en la plaza local, donde el volumen de ventas continuó siendo muy escaso.
Al cierre de los negocios, las pizarras de Chicago mostraron bajas de US$ 10,93 sobre los contratos noviembre y enero de la soja, cuyos ajustes resultaron de 562,37 y de 563,38 dólares por tonelada. Así, desde el récord alcanzado el 4 del mes pasado, de 650,74 dólares, el valor de la oleaginosa se depreció un 13,58 por ciento.
Los fondos de inversión se desprendieron ayer de 7000 contratos de soja, equivalentes a poco menos de un millón de toneladas. Sin embargo, estos grandes operadores conservan aún cerca de 200.000 contratos, por cerca de 27,6 millones de toneladas. Anticipar qué pueden los especuladores con semejante volumen es muy difícil, dado que en muchas ocasiones sus salidas o entradas en el mercado tienen poco que ver con fundamentos agrícolas. Sin embargo, ese volumen podría seguir achicándose de continuar el clima favorable para los cultivos sudamericanos.
En lo inmediato, y luego de las importantes bajas acumuladas en las últimas ruedas, no habría que descartar eventuales subas por movimientos técnicos de los inversores o por compras de ocasión de los "comerciales" (exportadores e industrias), que hoy pueden adquirir más mercadería por bastante menos dinero que un mes atrás. Además, China podría aportar cierta firmeza a las cotizaciones la semana próxima, cuando se reanuden las actividades comerciales en ese país tras la celebración del tradicional Festival de Mitad de Otoño. Es frente a estas posibles mejoras que los productores locales deberían estar atentos para "capturar" precios, en momentos en que los récords comienzan a quedar lejos.
En el mercado doméstico, ayer las fábricas ofrecieron $ 1830 por tonelada de soja disponible en las terminales de Ricardone, San Lorenzo, General Lagos, Villa Gobernador Gálvez y de San Martín, $ 20 menos que anteayer. Con esta nueva caída, el valor de la oleaginosa 2011
2012 se depreció un 8,04% desde el récord nominal de $ 1990 alcanzado el 14 del mes pasado.
La soja de la próxima cosecha se negoció a US$ 325 por tonelada en San Martín, San Lorenzo y en Arroyo Seco, por debajo de las propuestas de entre 330 y 335 dólares de la rueda anterior. En este caso, la depreciación del valor de la oleaginosa de la campaña 2012
2013 es del 8,45% desde el pico de 255 dólares registrado, también, el 14 del mes pasado.
En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), las posiciones noviembre y mayo de la soja perdieron US$ 8,80 y 3,80, mientras que sus ajustes fueron de 400 y de 331,70 dólares por tonelada.
Acerca del maíz, en el mercado local se diversificaron ayer las propuestas de los exportadores. Por cereal remanente de la cosecha 2011
2012, con entrega durante noviembre sobre Punta Alvear, los interesados ofrecieron US$ 180 por tonelada, 5 dólares menos que anteayer.
El maíz de la próxima cosecha, con descarga en abril sobre San Martín también, bajó US$ 5 al cotizarse a US$ 185. En cambio, en Timbúes el cereal para mayo se negoció a US$ 193, con una mejora de 8 dólares, y en Bahía Blanca lo hizo a US$ 185, con un repunte de 5 dólares. En Lima, el cereal se mantuvo estable, en US$ 190, y se sumaron ofertas de US$ 193 para junio en San Martín y en Arroyo Seco.
En el Matba, la posición diciembre del maíz bajó US$ 0,50 y cerró con un ajuste de US$ 185,50, en tanto que el contrato abril subió US$ 0,50 y terminó la rueda con un valor de 190,50 dólares por tonelada.
Los altibajos también se reflejaron en Chicago, donde la posición diciembre del maíz subió US$ 0,59 y quedó con un ajuste de US$ 298,51, mientras que el contrato marzo bajó US$ 0,10 y cerró con un valor de US$ 299,10.
Respecto del trigo, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires informó ayer que los molinos pagaron entre 970 y 1250 pesos por tonelada, según calidad y procedencia de la mercadería.
Por trigo de la nueva cosecha, los exportadores volvieron a pagar US$ 250 por tonelada en Bahía Blanca (enero/ febrero) y en Punta Alvear (marzo), y US$ 235 en Necochea (enero/febrero), sin cambios. En Timbúes, el cereal para diciembre se cotizó a US$ 230, con una baja de 10 dólares.
El girasol se negoció a $ 1690 en Rosario; a $ 1560 en Bahía Blanca, y a $ 1555 en Necochea, con bajas de $ 20. El girasol nuevo cayó US$ 10 en Rosario, donde se cotizó a US$ 300.