El subsecretario de Programación Agroalimentaria, Pablo Gómez Riera se reunió ayer con representantes de frigoríficos que traen carne de otras provincias, a fin de evaluar el aumento de la tasa que éstos deben pagar por el servicio de inspección que realiza la Dirección de Ganadería.

En la reunión participó el director de Ganadería Rodolfo Huerta, y otros funcionarios mientras por los empresarios estuvieron presentes el vicepresidente de la Cámara de Abasteros de Mendoza, José De Carolis, junto a representantes de frigoríficos y supermercados.

La polémica surgió porque la Ley Impositiva 2008 estableció un aumento de cuatro centavos y medio en el valor de la tasa, elevando de 0.035 a 0.08 centavos el monto a cobrar por kilo. Según explicó Gómez Riera, el monto de tres centavos y medio se fijó en julio de 2006 y, pasados dos años, se hacía necesario actualizarlo ya que lo recaudado se destina a mantener la estructura de contralor de Ganadería en los distintos puntos de ingreso a la provincia.

Asimismo señaló que la incidencia de este aumento en el costo del producto es escasa ya que, de trasladarse, solo debería incrementarse cuatro centavos por kilo de carne, lo que no implica mayor impacto en el precio final.

Los empresarios manifestaron su desacuerdo con incremento, señalando que en el pollo y en algunos cortes de carne, el gobierno nacional impone precios máximos por lo que ellos no pueden aumentar el producto, lo que les causará pérdida de rentabilidad.

Por otra parte, objetaron el hecho de que sólo la mitad de lo recaudado se destine al sector, ya que el otro 50% va a Rentas Generales.

No obstante, Mendoza figura entre las provincias que aplican la tasa más baja del país ya que otros distritos cobran más de 60 centavos por kilo de carne faenada introducida en su territorio.

Diario de San Rafael