La reciente intención de la Unión Europea (UE) y el Reino Unido de suspender la importación de carne vacuna de hembras provenientes de Brasil debido al uso de estradiol en la Inseminación Artificial a Tiempo Fijo (IATF) ha generado inquietud en el sector cárnico. El estradiol, una hormona utilizada en este tipo de tratamientos, está prohibido en granjas europeas, y las nuevas restricciones apuntan a reforzar este estándar en las importaciones de carne.
Según los analistas de Agrifatto, una firma de consultoría especializada en el mercado agropecuario, la restricción "no tendrá grandes impactos en las exportaciones brasileñas a la UE", ya que la participación de novillas en el sacrificio disminuye en el segundo semestre de este año. Sin embargo, la consultora advirtió que la medida podría afectar a los feedlots brasileños que buscan cumplir con los estándares de la Cuota Hilton, un régimen de exportación preferencial que permite el acceso de cortes de carne de alta calidad a la Unión Europea dentro de un volumen determinado.
A pesar de estos potenciales contratiempos, los envíos de carne brasileña hacia la UE y el Reino Unido representan un porcentaje menor del comercio total. En los primeros ocho meses de 2024, estos mercados contribuyeron con solo el 6,9% de los ingresos generados por las exportaciones de carne bovina brasileña, con un total de 521 millones de dólares.
Para el año completo 2023, los ingresos alcanzaron los 675 millones de dólares, según datos de la Secretaría de Comercio Exterior (Secex) recogidos por Agrifatto. Esto sugiere que el impacto global podría ser limitado, aunque ciertas operaciones específicas sentirán el peso de la nueva normativa.
La experiencia de Uruguay en la suspensión del estradiol
En el caso de Uruguay, el país ya tomó medidas drásticas para asegurar el acceso al mercado europeo. Diego De Freitas, director de los Servicios Ganaderos del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), explicó que desde septiembre de 2020 está suspendido el uso del estradiol en el país:
"Todos los meses, todos los años en septiembre, vengo comunicando que se mantiene esta suspensión, principalmente por las exigencias del mercado de la Unión Europea. Hasta el momento, no hemos recibido ninguna comunicación diferente de su parte. La situación se mantiene estable, aunque algunos productores se quejan, pero es una decisión necesaria para conservar el acceso al mercado europeo, ya que no contamos con una alternativa de doble mercado", señaló De Freitas.
El motivo principal de la suspensión radica en que la UE no permite la importación de carne de animales tratados con estradiol. Aunque en un principio se planteó la posibilidad de segregar a estos animales a través del Sistema Nacional de Información Ganadera (SNIG), el complejo sistema logístico y las limitaciones para garantizar que ninguna parte de la producción terminara en Europa hicieron inviable esta opción.
"Nosotros no tenemos la posibilidad de segregar la producción como otros países, como Argentina o Paraguay, que tienen establecimientos específicos habilitados para exportar a la UE. En Uruguay, la habilitación es a nivel país, lo que complica aún más la implementación de alternativas al uso de estradiol", agregó De Freitas.
Fuente: El Pais - Uruguay