En este contexto, varios indicadores económicos y del sector del real estate muestran signos de debilidad, lo que plantea interrogantes sobre el futuro económico de la región.

Evolución Comercial

A principios del siglo XXI, los países del Cono Sur, que incluyen a Chile, Argentina, Uruguay, Paraguay y Brasil, solo destinaban el 4% de sus exportaciones a China. Sin embargo, en las últimas dos décadas, esta cifra ha experimentado un incremento gradual y, en promedio, actualmente el 16% de sus productos se dirige al mercado chino.

Chile y Perú destacan como líderes en este crecimiento, aumentando significativamente sus exportaciones hacia la nación oriental. En contraste, países como Brasil, Uruguay y Colombia han experimentado una disminución en sus ventas a China, especialmente después del impacto de la pandemia.

Indicadores Económicos

Los indicadores de producción de insumos para obras e industria, como cemento y acero crudo, han mantenido un crecimiento leve pero relativamente estable. Por otro lado, el sector inmobiliario muestra caídas interanuales su crecimiento durante los últimos ocho trimestres. Además, la inversión en desarrollos inmobiliarios ha sufrido un colapso del 15.2% en los últimos doce meses, tras un crecimiento superior al 10% a mediados de 2021.

Desafíos Económicos en la economía asiática

A diferencia de Argentina, donde la inflación es un problema significativo, el país de la Gran Muralla enfrenta una alta deuda en su economía, principalmente a nivel gubernamental. Esto limita la capacidad del gobierno para estimular la economía mediante políticas fiscales expansivas. Su desaceleración económica genera preocupación en las economías de los países andinos y plantea cuestionamientos sobre su impacto en América Latina en su conjunto.

Impacto en América Latina

Los países como Perú y Chile, han mantenido relaciones comerciales sólidas con China, lo que los hace particularmente vulnerables a sus fluctuaciones económicas.
Por otro lado, la dependencia de la sociedad asiática en la demanda de materias primas, como minerales (el famoso litio Argentino), petróleo y productos agrícolas, también podría generar presión a la baja sobre los precios internacionales y afectar las economías exportadoras.

Desafíos y Adaptación

Esta situación plantea desafíos significativos para los países Latinos en su conjunto, que deben diversificar sus economías y reducir su dependencia en un momento de incertidumbre económica global.

Un ejemplo de esto sería aumentar lazos comerciales con India, Sudáfrica (se encuentra incentivando la industrialización), Japón y algunos líderes Europeos como Alemania, Italia, entre otros.

La gestión de esta transición será crucial para mantener la estabilidad económica en la región.

Conclusión

Ante los panoramas de incertidumbre en los ciclos económicos, los mercados financieros nos ofrece herramientas para disipar riesgos.

Los contratos de futuros, nos permiten negociar con una contraparte a qué precio queremos vender o comprar un producto en un futuro.

Un ejemplo con precios del día de hoy:

El precio negociado de Soja a noviembre del 2023 es de USD 412, si un productor agropecuario teme que, por la caía de la demanda China, la tonelada de Soja valga menos llegada esa fecha, pero no puede liquidar granos al día de hoy, lo que hace es vender un contrato de 100 toneladas para asegurarse que, en caso de que el precio caiga en la pizarra de la BCR, la diferencia se le acredite en su cuenta de inversión.

Es importante consultar con su asesor financiero para resolver cuál es la estrategia ideal para su situación particular.

Por Alejandro Pagliero - Asesor Financiero de Nasini SA
Fuente: Agroeducacion