Como todos los años, se realizó la reunión de las Regionales Aapresid que conforman el Nodo Oeste, nucleando a los productores de Córdoba. Durante la misma se compartieron los resultados de la cosecha gruesa de la campaña 2021/2022. Marcos Murgio (INTA) fue el especialista invitado que presentó un estudio detallado del rendimiento de soja, analizando con qué magnitud influyeron las variables climáticas y de manejo de mayor peso.
Para esto se analizaron más de 1100 datos de lotes de productores, representando casi 100.000 ha distribuidas en toda la provincia. Dentro de ese enorme conjunto de datos, se destacaron las variables de manejo que definen la estructura del cultivo, como fecha de siembra, grupo de madurez, densidad de siembra, arreglo espacial, entre otras. A su vez los datos fueron agrupados previamente por zonas agroclimáticas.
Según Murgio, que sea un año niña, no necesariamente es una mala noticia. En determinadas zonas el rendimiento de la soja fue muy bueno, e inclusive les fue mejor que en otros años, aunque en otras no.
Zona Sudeste: la napa amiga
Se observó que para la zona de Marcos Juarez durante el periodo crítico de la soja, y previamente también, llovió muy poco, por lo que era de esperar mucho estrés. Sin embargo los rendimientos en secano no fueron tan malos, y se mantuvieron cercanos a la media de los últimos cinco años. Aquí, la napa sería una variable protagonista que marca las mayores diferencias en cuanto a rendimiento.
Zona Sur: alivio del cielo
Una sorpresa favorable se vio en el sur de la provincia. Aunque históricamente los rendimientos son menores a los del fértil Sudeste de Córdoba, en esta campaña fueron similares.
Esto se explica porque las precipitaciones en general fueron buenas. Más allá de la existencia de algún déficit, este no coincidió con la etapa de mayor susceptibilidad del cultivo. Así la soja compensó al recuperarse la oferta hídrica.
Centro y Norte: las zonas más castigadas
Por otro lado, en las regiones centro hasta norte sufrieron bastantes pérdidas por estrés hídrico y se vio reflejado en los rendimientos.
Al analizar los planteos, comentó Murgio, estos se empiezan a parecer al del norte del país.
Una herramienta para escapar a las altas temperaturas y al déficit hídrico probable de enero y parte de febrero, es retrasar la fecha de siembra. De esta manera el cultivo transita esos momentos en estadios vegetativos o reproductivos temprano.
En la región centro, esta práctica se debe a que además las primaveras y los otoños son más secos. Estos perfiles largan con menos contenido de agua y los grupos de madurez son más cortos que los usados en el norte de la provincia.
En estas zonas, los suelos que no tienen la misma capacidad de retención que tiene el sudeste de Córdoba. Ante una perspectiva de poca oferta hídrica, los planteos deben estar enfocados en minimizar las pérdidas y mejorar nuestros rendimientos alcanzables.
Estrategia para la campaña que se viene
Es fundamental planificar lote a lote. Es muy importante medir agua disponible, presencia de napa, y después ver la perspectiva climática a mediano plazo, explicó Murgia.
En estos planteos más defensivos, las fechas tardías se acompañan con un acercamiento entre hileras, evitando grupos de madures relativamente cortos, para mejorar la captura de radiación.
Los grupos de madures cortos pueden ser muy buenos en fechas intermedias, pero en fechas muy tempranas o muy tardías empiezan a tener dificultades para generar una buena estructura vegetativa y capturar toda la radiación.
En los ciclos un poco más largos el distanciamiento depende de las condiciones imperantes. No es lo mismo un lote con influencia de napas, que un perfil de seco. Aumentar un poco la longitud del ciclo una estrategia a considerar cuando tenemos limitaciones para el crecimiento por baja oferta de recursos, para ofrecerle al cultivo la capacidad de compensar.
En cuanto a los planteos con influencia de napas, prácticamente se puede independizar de los pronósticos y eso permite ir hacia una estrategia un poco más ofensiva, buscando potencial de rendimiento. Ahí el principal limitante es capturar radiación durante el período crítico, y eso se logra con fechas tempranas.
Para finalizar, Murigia resaltó que en general los planteos de los productores que se evaluaron son correctos, se ven buenos planteos. Tal vez porque desde hace bastante que se viene trabajando en la difusión de estas tecnologías de procesos, y el productor ya lo tiene incorporado.
Fuente: Aapresid