Desde CICCRA queremos alertar a la industria, a los productores ganaderos y a los funcionarios nacionales que las medidas implementadas por medio de la Res Nº 60, complementada hoy por la Res Nº 3, nos vuelven a llevar al achicamiento primero, y a la destrucción después, de la ganadería de nuestro país.
Queremos recordar que la profundización de los ROE (hoy disfrazados de DJEC) en 2008, entre otras medidas, nos llevó a la pérdida de 12,3 millones de cabezas de ganado vacuno y, luego de un corto período, al aumento del precio de la carne en el mercado interno que pasó de 3 $/Kg a 12 $/kg.
Las medidas tomadas, copiadas de las implementadas por la dupla Guillermo Moreno-Cristina Kirchner en 2008, atacan directamente a la producción ganadera, en una nueva embestida de este Poder Ejecutivo contra el sector agropecuario, quién, es muy posible, que reedite la épica del mayor movimiento del sector en defensa de los intereses de los productores.
Aún tenemos esperanza de que se revean las medidas, porque su implementación sin dudas generará caída de las exportaciones, con pérdidas de 500 millones de dólares sólo en el presente año y un proceso de retroceso de nuestra producción de carne vacuna, con pérdida de riqueza, empleo y arraigo en el interior de nuestro país.
Recordemos que en 2015 exportábamos 7% de las 2,7 millones de toneladas producidas, por un valor de 870 millones de dólares. En tanto, en 2019 (último año no influenciado por la pandemia) exportamos el 27% de 3,1 millones de toneladas, por un valor de 3.100 millones de dólares.
La implementación de estas medidas, de llevarse a cabo, afectará no sólo a los productores, sino también a la industria, a los consumidores y a toda la sociedad.